En las últimas horas se conoció que el alcalde de Venadillo, Ilber Beltran, habría llegado en compañía de la Policía Nacional hasta el Hospital Santa Bárbara con el fin de notificar a la gerente Sandra Ruiz de su despido, situación que se complicó toda vez que la ciudadanía habría denunciado que la misma fue sacada a la fuerza mientras los servicios asistenciales se suspendieron por unas horas.

Luego de lo ocurrido, el alcalde del municipio explicó lo que sucedió en el centro asistencial indicando que el despido de la gerente no fue por decisión propia, sino que se estaría dando cumplimiento a una decisión de la Superintendencia de Salud de declararla insubsistente toda vez que no habría pasado su calificación de gestión.

El mandatario informó que llegó en horas de la mañana al hospital con el fin de notificar a la funcionaria de la decisión y poder hacer el empalme con la persona que la reemplazaría, sin embargo, el alcalde señaló que la misma se habría encerrado en su oficina para no acatar la orden por lo que pidió el acompañamiento de las autoridades y varios funcionarios del centro asistencial fueron testigos de lo ocurrido.

Es así como el mandatario explicó que cada año “a los gerentes de los hospitales públicos se les hace una calificación en su gestión y el que da un visto bueno es la Supersalud”, lo que evidenció que “la señora no cumplió en su gestión, con el plan de desarrollo y por eso fue relevada por otra persona para que mejore la calidad del hospital”.

El alcalde concluyó que la oposición de la ciudadanía frente a la decisión de retirar del cargo a Sandra Ruiz al parecer se debía a que “estamos a seis meses de campaña donde cuatro o cinco politiqueros del municipio quieren dañar la buena imagen de la gestión que hemos hecho en el municipio”.