“En nuestro gobierno no vamos a permitir ni carteles de toga, ni políticos amangualados”: Paloma Valencia
Una de las propuestas presentadas por Paloma Valencia, precandidata presidencial por el Centro Democrático, está direccionada a que los ciudadanos puedan recibir de parte de la justica procesos con soluciones rápidas y positivas.
“Lo que realmente necesitamos es que toda la justicia se parezca a la tutela, porque una persona coloca una tutela y si se la pueden fallar solucionándole el problema, pero en cambio, si pone un proceso nunca le resuelven nada, vamos a tener una justicia que le responda al pueblo”, precisó Valencia.
La precandidata destacó en materia de empleabilidad, que en muchas ciudades de Colombia en especial en Ibagué, se vive el abuso del poder, donde los jefes de turno llegan a la cabeza de la institución y le otorgan los contratos a sus amigos, “entonces la plata de las obras del Tolima e Ibagué terminan simplemente diluidas en contratos para su círculo cercano”.
Agregó que este tipo de empleo hace esclavos a las personas, ya que limita su función política y no le permite al ciudadano exigir y reclamar nada.
“Queremos generar empleo en el sector privado, trabajar con los jóvenes ibaguereños, que la gente pueda encontrar un buen cargo para realizar su sueño de construir su familia, de ahorrar para una pensión y comprar su casa”, manifestó.
Frente a esto explicó que se deben bajar los impuestos para que los empresarios no estén ahogados y puedan generar más oportunidad en empleabilidad, mejorando con ello el salario y la calidad de vida.
Paloma Valencia habló de cómo el gobierno de Juan Manuel Santos en materia de economía ha tenido en la historia de la administración del estado colombiano la mayor bonanza en recursos, pero a la hora de retribuirle a la ciudadanía, no les ha correspondido ni una sola parte porque este gobierno se la gasto en burocracia.
Y añadió que ha tenido cerca de 76 mil contratistas, 19 mil cargos de planta, agencias del estado para nombrar a toda la clientela política con la que Santos ha comprado la gobernabilidad en el Congreso.
En materia de salud, su acotación estuvo direccionada a que los dineros para mejorar las entidades médicas se la quieren entregar a las Farc. Le quietaron además las regalías a varias ciudades productoras porque esos recursos deben emplearse en la financiación del postconflicto.
Y completó diciendo, “ante esto uno se pregunta, dónde queda la plata para los cafeteros de los municipios de Rovira, del Líbano, los recursos para los arroceros del sur del Tolima, para las mejoras de la reserva activa de las Fuerzas Armadas y a la propia ciudadanía, pues resulta, que se la han dilapidado toda en politiquería”.