¿Por qué votó sí al referendo de Vivian Morales?

Quiero dejar claro que soy un hombre incluyente, creo que en este país cabemos todos, no comparto la discriminación y soy respetuoso de los derechos de la comunidad LGBTI y de las parejas homoparentales. En parte lo que se estaba discutiendo el día de ayer en la Comisión Primera era si le permitíamos a la sociedad colombiana pronunciarse o no sobre ese tema que no es de menor valor; la Comisión Primera de la Cámara no estaba votando afirmativa o negativamente el contenido del proyecto, sino la posibilidad de que los colombianos se pronunciaran en las urnas sobre esa política pública y el tratamiento que se le debe dar a los menores en un proceso de adopción.

Lo primero que reivindicaba Carlos Edward Osorio era la posibilidad de que los ciudadanos participen en temas -como lo dice el artículo segundo de la Constitución Política- que tiene que ver con todos especialmente en las decisiones que nos afectan. Desde una segunda perspectiva, estaba de por medio la reivindicación de unas competencias que corresponden al Congreso frente a la Corte Constitucional; en los últimos tiempos esa corporación judicial a la que por supuesto respeto ha venido emitiendo unos pronunciamientos que a mi juicio y en mi modo de ver han ido más allá de los alcances propios de la Constitución Política, que habla de un modelo y un concepto de familia, basta revisar el artículo 42 donde claramente se refiere a un hombre y una mujer.

Yo como respetuoso de la ley reivindico también el cumplimiento de la Constitución, que no sólo habla de la familia integrada por un hombre y una mujer, sino que también pone a los niños por encima de los derechos de los demás. Además del tema de los mecanismos de participación, también estaba el modelo de familia que está vigente. Debo decir que el modelo de familia y el concepto de adopción debe ser propio de un hombre y una mujer. Por otra parte, dijimos que los niños abandonados y vulnerables deben ser adpotados por papá y mamá, porque si fueron tan desconocidos en sus derechos lo mínimo que tenemos que hacer como Estado y sociedad es ofrecerle el mejor de los escenarios, y ese es el de un padre y una madre. Nosotros no votamos en contra de la población LGBTI, no creo que los homosexuales sean un peligro para los niños, pero sí creo que debemos priorizar sus derechos.

¿Cómo explica el hecho de que las mayorías de un país democrático no pueden decidir mediante los mecanismos de consulta popular los derechos de las minorías?

Se ha venido desarrolando un concepto que tiene mucho de largo como de ancho; las mayorías no pueden aniquilar a las minorías, la democracia -que es el gobierno del pueblo- no puede llegar al punto de borrar las expresiones minoritarias. Muchas personas dicen que este tipo de temas no se pueden decidir por mayorías, yo creo que aquí no se trata de hablar de los derechos de la comunidad LGBTI sino de los derechos de los niños, que no los podemos utilizar como un laboratorio, que no son para experimentar. Estamos hablando de unos niños que fueron dejados en situación de abandono, que los preparan para ser adoptados. Muchas personas se rasgaron las vestiduras el día de ayer reivindicando los derechos de los homosexuales, personas a quienes respeto profundamente, pero esa no era la discusión. Siempre defenderé a la comunidad LGBTI frente a derechos patrimoniales, a pensión de su pareja, a que no sean discriminados, maltratados, desconocidos.