Llegó un proyecto al Senado de la República que busca reformar la Ley 617 del 2000, que agrega un régimen de incompatibilidades para los alcaldes. La norma marca, entre otros asuntos, que los mandatarios no tienen permitido “intervenir, en nombre propio o ajeno, en procesos o asuntos, fuera del ejercicio de sus funciones, en los cuales tenga interés el municipio”, como lo es el caso de las elecciones de alcalde.

Los autores de la iniciativa mencionan que se necesita agregar a esta ley una prohibición para que los alcaldes y gobernantes que se retiren de su puesto no participen en política durante los siguientes 12 meses. Esta ley también se aplicará para los que terminen su periodo de gobierno con normalidad. 

“Los alcaldes, así como los que los reemplacen en el ejercicio del cargo, no podrán celebrar, en su interés particular, por sí o por interpuesta persona o en representación de otro, contrato alguno con el respectivo municipio (...) tampoco tomar parte en las actividades de los partidos, movimientos políticos y grupos significativos de ciudadanos, sin perjuicio de ejercer el derecho al sufragio”, explica la iniciativa.

El representante Juan Espinal y la senadora Paola Holguín, indicaron que el proyecto ya lo han denominado como “Ley Daniel Quintero”, por la reciente renuncia de Quintero a la Alcaldía de Medellín para hacerle campaña a Juan Carlos Upegui, quien esta avalado por Independientes, el partido de Quintero. “Queremos evitar que un mandatario, sea alcalde o gobernador, tome la decisión de renunciar para irse a una campaña electoral y hacerse reelegir en cuerpo ajeno”, requirió Holguín.

Abogados indican que Quintero no ha cometido ningún delito al tomar la decisión de renunciar a su cargo para participar en una campaña política, dado que la ley no lo contempla así. Sin embargo, se advierte que él y otras personas se habrían favorecido de un vacío legal que se debe corregir para no afectar a los ciudadanos o electores de alcaldes y gobernadores.