La comunidad hotelera del municipio de Melgar, conocida como el “Mar de piscinas” del Tolima, ha elevado una fuerte voz de protesta ante la crítica situación que enfrenta la región. Más de 500 hoteleros han manifestado su preocupación por los constantes trancones de entre siete y ocho horas generados por las intervenciones viales realizadas por la concesionaria Vía 40, afectando gravemente la llegada de turistas y la economía del sector.

El turismo, principal motor económico del municipio, está en riesgo. Según los gremios hoteleros, las demoras en la movilidad durante los fines de semana y temporadas altas han ocasionado una disminución del 80% en la ocupación hotelera. En un destino donde el turismo representa hasta el 90% de las actividades económicas, esta caída es devastadora.

Los propietarios de establecimientos, especialmente los pequeños hoteleros y alojamientos rurales, reportan pérdidas mensuales que oscilan entre 300 y 500 millones de pesos. Muchos han tenido que tomar decisiones drásticas, como cerrar sus negocios. “Un amigo empresario tuvo que cerrar su hotel, su única fuente de ingresos. Es una situación lamentable que afecta a cientos de familias”, expresó Carolina Mora, diputada del Tolima.

La también comunicadora social, manifestó que los hoteleros piden al Ministerio de Transporte, al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, y a las autoridades nacionales que intervengan de manera inmediata. Aunque reconocen la importancia de las obras viales para el desarrollo del departamento, solicitan planos de movilidad adecuados que regulen los cierres durante las horas pico y los fines de semana.
“Son más de 500 hoteleros los que han elevado digamos esta voz de protesta, ellos dicen que hasta el 13 de diciembre espera que se realice una mesa de trabajo de concertación de los ministerios en el departamento del Tolima o si no pues obviamente ellos van a recurrir a las vías de hechos constitucionales a las que tienen derecho como colombianos pues teniendo en cuenta que es sus finanzas, su economía”, subrayó.

Además, dio a conocer que los problemas de movilidad, los altos costos de los servicios públicos, como la energía, agravan la crisis económica del sector. “No hay garantías para el desarrollo económico y social en esta zona del oriente del Tolima”.

Con la llegada de las festividades de fin de año, época tradicionalmente alta para el turismo en Melgar, los hoteleros temen que la crisis empeore si no se toman medidas inmediatas. “Sin aviones de movilidad efectivos, el flujo turístico no se reactivará, lo que afectará también a municipios cercanos como Carmen de Apicalá e Icononzo, que dependen del turismo”, advirtió Mora González.

Finalmente, la asambleísta hace un llamado de auxilio no solo en busca de rescatar la economía de Melgar, sino también preservar su identidad como destino turístico clave en el departamento del Tolima.