En Colombia el aborto es legal bajo tres circunstancias, cuando el embarazo pone en peligro la salud -física o mental- de la mujer, o su vida; cuando el embarazo es resultado de una violación o de incesto; cuando hay malformaciones del feto que son incompatibles con la vida por fuera del útero.

Fue precisamente este último el que dio origen a una ponencia que busca poner restricciones al aborto legal a partir de las 24 semanas de gestación.

Una mujer de 33 años que se encontraba en la semana 26 recibió la noticia de parte de su médico de que el feto presentaba mal formaciones y podía poner en riesgo su vida por lo que le recomendó interrumpir el embarazo, sin embargo la mujer se enfrentó a miles de trabajas para poder ejercer su derecho.

Luego de muchos trámites la mujer logró acceder al procedimiento e interrumpió su embarazo.

Sin embargo cuando el caso llegó a revisión de la Corte Constitucional la magistrada Cristina Pardo fue designada como ponente y afirmó que no se había probado que la vida de la madre estuviera en peligro y señaló a la jueza de haber cometido feticidio.

Varias organizaciones a favor del aborto en el país encendieron las alarmas por la actuación de la magistrada pues se presume que podría limitar las causales con las que hoy se puede acceder legalmente a esta práctica pues cuando era  Secretaria de Presidencia, hizo declaraciones que mostraban una tendencia en contra del aborto.