Alerta temprana ante el manejo impropio del relleno de La Miel
![Álvaro Montoya](/sites/default/files/styles/wide/public/2024-02/alvaro-montoya.jpg?itok=RlbdLX9J)
Pues al parecer ya olvidamos la emergencia que vivimos hace tan solo un par de meses la cual podría repetirse si no se atiende con prontitud y sin displicencia lo que allí acontece, y los reclamos de la comunidad ahí presente.
Todo empezó hace 20 años cuando el Incora de esa época y la misma comunidad cedieron un espacio de terreno al municipio de Ibagué y se otorgó la licencia ambiental a Interaseo S.A.ESP. dizque para desarrollar un Parque Industrial de Residuos Sólidos que de industrial no tiene nada y mucho menos de parque, y como proyecto complementario de una Planta de Aprovechamiento que escasamente duró un año, para luego convertirse simplemente en un ¨basurero a cielo abierto¨ como lo señala don Cesar Quintero quien lleva allí con su familia y su comunidad, más de 28 años.
Siendo el único relleno sanitario que tiene Ibagué y toda su área metropolitana, el cual pasó de relleno municipal a departamental sin mayor consideración que lo técnico ambiental, pues en lo social no pasó nada y para ello solo basta escuchar la misma comunidad; preocupación que amerita una visita de expertos de @MinAmbienteCo y @defensoriaCol
Solo con el incremento exponencial de 200 a 500 toneladas de basura/día en el relleno sanitario de La Miel, habría motivo para disparar las alarmas tempranas con relación a la sostenibilidad de ese destino, pues precisamente por esa saturación se cerró el relleno sanitario Combeima en Ibagué y están paniqueados en Boyacá con el relleno sanitario de Pirgua en Tunja. Eso sin considerar el llamado y reclamo que viene haciéndose frente a la contaminación producida por los lixiviados que circulan allí, lo desagradable de su aspecto y mal olor. También frente a sus derechos como comunidad expresados en un Recurso de Reposición presentado contra la Resolución Cortolima No.131 de 2024 que amplía la licencia a Interaseo SAS. como operador del relleno por más de 17 años, justificado precisamente por el incumplimiento en el componente socioeconómico y la no socialización del estudio de impacto ambiental. La comunidad enfatiza que ese operador siempre ha incumplido y hoy se limita a justificar que por tener el asentamiento más de 10 años conviviendo con el relleno sanitario, ya de por sí las personas asimilaron todo el impacto ambiental, socioeconómico y hasta cultural; argumento que indignó la población allí presente a tal punto que están dispuestos a hacer valer sus derechos con recursos, tutelas y otros mecanismos de protesta que les asiste como personas y comunidad. Al no ser escuchada se espera que regresen a las legítimas manifestaciones populares para defender sus derechos y el futuro de su comunidad. Por ello es preocupante lo que allí viene pasando donde nadie atiende sus reclamos e inconformidad.
Ahora bien, parece que el efecto del fallo del Tribunal Administrativo del Tolima frente al funcionamiento irregular por el manejo inadecuado de lixiviados y problemas de erosión de los taludes en el relleno sanitario, fue básicamente la rápida renovación de la licencia ambiental a Interaseo SAS por más de 17 años, sin importar la socialización de su impacto ambiental ni el cumplimiento del componente socioeconómico según la comunidad, y sin considerar además los reclamos e inconvenientes que por décadas hayan tenido o pudieran llegar a tener los custodios del relleno sanitario de La Miel. población que también es ibaguereña.
Acciones preventivas suelen darse cuando se escucha y se actúa. Y como está de moda el cabildo abierto, prudente sería programarlo y desarrollarlo para ese tema en particular, antes que la comunidad se canse de no ser escuchada y salga a protestar como lo están haciendo contra el Ibal, y aunque pareciera diferente los oídos sordos de Interaseo e Ibagué Limpia, nos podrían exponer como ciudad y como región a un colapso ambiental aún mayor al que se vivió hace poco tiempo, donde tocó ir hasta Girardot durante varios días a depositar basuras cuando la comunidad de La Miel cerro la entrada del relleno, precisamente por no ser escuchada y atendida en su momento.