Científico Manuel Elkín Patarroyo denuncia amenazas de muerte
El científico Manuel Elkin Patarroyo denunció que, de manera sistemática, ha recibido amenazas de muerte contra él y su familia en los últimos días.
De acuerdo con Patarroyo, a través de su correo y los del instituto que dirige han llegado mensajes anónimos en los que, con fuertes palabras, lo amenazan de muerte y le exigen abandonar el país so pena de atentar contra su vida y la de su familia.
En esos mensajes lo conminan a dejar la investigación para desarrollar una vacuna contra la malaria, en la cual utiliza –desde hace algún tiempo– monos de la especie Aotus nancymaae que habitan en el trapecio amazónico.
El científico ha sido centro de una polémica por la utilización de estos monos, en la cual se ha enfrentado a animalistas que lo han denunciado ante las autoridades por su práctica (con fallos a su favor), pero esta es la primera vez que recibe ese tipo de intimidaciones.
El inmunólogo dice que no acostumbra a responder agresiones y que cuando ha tenido que enfrentar la justicia en los tribunales, lo ha hecho con el rigor científico y el respeto que merecen la ciencia y las instituciones.
“Sin embargo, ante estos hechos, que han venido creciendo dramáticamente, no tengo otra salida que denunciarlo y ponerlo en conocimiento del público nacional e internacional”, dice Patarroyo.
Al parecer, estas agresiones no solo las ha recibido por los medios electrónicos –incluidas las redes sociales– y el teléfono, sino también le han llegado de manera personal, como ocurrió el lunes pasado en Tunja. Al terminar una charla en la Universidad Pedagógica y Tecnológica, fue increpado por individuos con gritos y empujones frente a directivos de esa institución.
Si bien Patarroyo dice tener claro que las amenazas que venía recibiendo estaban relacionadas con el desarrollo de su vacuna, ahora considera que existen intereses que van más allá de lo ambiental y lo ecológico.
“Tengo que haber pisado callos muy poderosos –afirma– porque este nivel de agresión desborda cualquier tipo de reivindicación de los grupos de activistas”. Al ver que ahora se involucra a su familia y a su grupo de trabajo, siente “temor por los potenciales desenlaces”, frente a los cuales dice verse “completamente inerme”.
“He sido un científico comprometido con el bienestar del país y de la humanidad”, agrega Patarroyo, quien resalta su disposición para cualquier debate intelectual respetuoso.