La organización de las Naciones Unidas para la Alimentación, FAO reiteró su voluntad de seguir trabajando mano a mano con Colombia para luchar contra el hambre y la pobreza.

Así lo dio a conocer el director general del organismo internac job nal  afirmó Qu Dongyu, luego de dialogar con la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez.

La señora Márquez expresó el compromiso del Gobierno colombiano en trabajar por la erradicación del hambre, y le solicitó el apoyo de la FAO para mejorar la seguridad alimentaria y la nutrición, a partir del fortalecimiento de la agricultura sostenible en el país. 

Temas priorizados en la carta de intención entre el Gobierno Nacional y FAO, firmada por el presidente Petro y el director general Que Dongyu en enero de este año, y con la que se busca fortalecer las capacidades técnicas en materia de tenencia de tierras, extensión agropecuaria, fortalecimiento de medios de vida y sistemas agroalimentarios, entre otras. 

Todas estas, en contribución a la meta Hambre Cero, contemplada en el Plan Nacional de Desarrollo (PND), particularmente desde el derecho humano a la alimentación, concebido de manera integral y que vincula el acceso a alimentación saludable en procura de mejorar la salud de los colombianos. 

“Sabemos que el tema del hambre es un problema global que afecta a América Latina y a mi país. Lamentablemente tenemos alrededor de 15 millones de personas en Colombia con hambre o mal nutridas, y esto supone un desafío enorme, como gobierno, que es erradicar esta situación", dijo Márquez. 

En tal sentido, acciones como la mejora en la calidad de vida de los productores de la agricultura campesina, familiar y comunitaria, ACFC, partiendo de la tenencia de tierras para la producción sostenible, planificada y eficiente será clave; así como la asociatividad, comercialización, extensión e innovación agropecuaria. 

Elementos indispensables para que la transformación productiva, tal como lo propone el PND, sea posible y se aproveche así el potencial productivo del país como motor de desarrollo, implementando medidas sobre acción climática, que permitan preservar los recursos naturales. 

La vicepresidenta Márquez también afirmó que “la tierra productiva está en manos de unos pocos sectores, lo que lleva a la inequidad y desigualdad de acceso para los campesinos, los indígenas, los afrodescendientes y las mujeres", por lo que la Reforma Agraria Integral, en el marco del Acuerdo de Paz, hace parte de las prioridades del gobierno nacional.