En busca de empoderar a las mujeres privadas de la libertad en temas relacionados con el Derecho Penal y los Derechos Humanos, la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano, a través de su semillero de investigación, emprendió un proceso de educación y acompañamiento. 

Este proceso culminó con una ceremonia oficial y la entrega de diplomas que resaltan el compromiso y la resiliencia de estas mujeres. Cada una de ellas ha atravesado desafíos únicos que las llevaron a encontrarse en esta situación. 

Para la entrega de los certificados, contamos con la presencia de la directora del centro penitenciario, Myriam Elena Calle; la decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Olga Illera; la profesora Beatriz Suárez; y el doctor Juan Pablo, en representación del Ministerio de Justicia y del Derecho. 

Calle expresó su agradecimiento a la Universidad por llevar a cabo iniciativas que contribuyen a humanizar el sistema carcelario y penitenciario. "Aproximarse, comprender las problemáticas y necesidades, y proporcionar conocimientos jurídicos es inmensamente valioso. Agradecemos a la Universidad y les extendemos una cordial bienvenida siempre que deseen colaborar". 

Estas valientes iniciativas tienen como objetivo sensibilizar y respaldar a un grupo poblacional que necesita apoyo. Además, buscan acercar a la comunidad académica y a los estudiantes a la vida cotidiana de estas mujeres. Es esencial que los estudiantes de Derecho comprendan las complejas dinámicas que estas personas enfrentan a diario, lo que les permitirá abordar esta realidad de manera más efectiva. 

La decana Olga Illera resaltó la importancia del trabajo en equipo y el poder latente en cada una de las participantes. "A menudo subestimamos nuestra propia fuerza y potencial. Les animo a emplear esa fuerza para transformar sus futuros y contribuir a un mundo mejor para todos. La privación de la libertad no debe significar la privación de los sueños". 

Además, destacó el compromiso misional de la Universidad con el país, señalando que están dispuestos a estar presentes donde se les necesite, con la firme intención de cambiar vidas. "Extendemos nuestro agradecimiento a las 38 mujeres que, a su vez, han impactado positivamente la vida de nuestros estudiantes del semillero. Aquí, todos aprendemos juntos".