Este martes 10 de septiembre, el mundo de la ciencia sufrió una pérdida irreparable con el fallecimiento del doctor Francisco Lopera, destacado investigador de la Universidad de Antioquia. La institución informó la noticia a través de un comunicado en el que expresó su profundo dolor por la partida de "un ser humano invaluable, profesional riguroso, profesor inspirador e investigador creativo que marcó un antes y un después en la lucha contra el alzhéimer".

La comunidad científica, tanto en Colombia como en el exterior, lamenta la pérdida de uno de los investigadores más brillantes en el campo de las enfermedades neurodegenerativas. Acompañado por su familia, Lopera enfrentaba desde hace meses un diagnóstico de melanoma que lo alejó de la investigación que fue su vida. Aunque su enfermedad lo apartó de su trabajo, su legado continuará a través de las múltiples contribuciones que dejó en la ciencia.

Lopera alcanzó reconocimiento internacional en abril de este año al convertirse en el primer latinoamericano en recibir el prestigioso premio Potamkin, conocido como el 'Nobel' de la investigación sobre alzhéimer. Este galardón, otorgado por la Academia Americana de Neurología y la Fundación Americana del Cerebro, fue entregado en una ceremonia en Denver, Estados Unidos, donde Lopera presentó un resumen de las investigaciones realizadas durante 40 años.

"Este es el reconocimiento más importante que hemos recibido. Para nosotros es un orgullo y un honor que la comunidad internacional valore nuestra labor en el estudio del alzhéimer", expresó Lopera en aquel momento. Sus investigaciones fueron clave para el descubrimiento de la mutación "paisa", una variante genética que ha permitido avanzar en el entendimiento de la enfermedad y sus posibles tratamientos.

Este mismo año, en una entrevista concedida a Econoticias Lopera reflexionó sobre los avances de su investigación. "Hemos descubierto que ciertos genes pueden proteger a las personas del alzhéimer, y estamos explorando cómo utilizarlos para prevenir la enfermedad", explicó con entusiasmo. También habló sobre el impacto global de sus hallazgos y la importancia de la prevención en la lucha contra las enfermedades neurodegenerativas.

Durante la entrevista, Lopera reveló que su equipo había identificado casos excepcionales de personas que, a pesar de portar el gen que causa alzhéimer, no desarrollaron la enfermedad gracias a la presencia de genes protectores. Este descubrimiento, según él, abre una nueva esperanza para millones de personas en todo el mundo, no solo para tratar el alzhéimer, sino para prevenirlo de manera efectiva.

El legado del doctor Francisco Lopera seguirá vivo en cada uno de los avances científicos que inspiró. Su lucha incansable por encontrar respuestas al alzhéimer y su dedicación a la investigación lo convirtieron en un referente mundial. La comunidad académica y científica de Colombia y del mundo lo recordará como un pionero que dejó una huella imborrable en la medicina moderna.