La decision se conoció faltando dos minutos para la una de la tarde, luego que el Fiscala General de la Nación, Nestor Humberto Martínez, anunciara su renuncia irrevocable al cargo, producto de su inconformidad por la decisión de la JEP (Justicia Especial para la Paz), que ordenó la inmediata liberación del exjefe guerrillero Seuxis Paucias Hernández Solarte, alias Jesús Santrich y no permitir su extradición a los Estados Unidos. 

La determinación se hizo pública a través de una rueda de prensa en medio de la cual, el Fiscal Martínez leyó el siguiente comunicado:

COMUNICADO A LA OPINIÓN PÚBLICA

Bogotá, D.C. 15 de mayo de 2019.

Progresivamente se consolida en Colombia un estado de cosas antijurídico que conjura contra el estado de derecho y expone a la sociedad frente al crimen, en medio de las 
advertencias de la Fiscalía General de la Nación. En el futuro la reincidencia en el secuestro y la extorsión, entre otros delitos, podrá convivir con los privilegios de la justicia transicional; en adelante los delitos permanentes de narcotráfico no podrán ser investigados por la justicia ordinaria y se juzgarán por la JEP con un sistema de beneficios, pese a que el colectivo social está amenazado como nunca por el cultivo y tráfico ilícito de drogas; las facultades de investigación de la Fiscalía respecto de los crímenes ocurridos durante el conflicto quedaron emasculadas y se abrió una puerta falsa para restringir la extradición. ¡¡¡Todo esto en nombre de la paz!!!.

Por si fuera poco, de acuerdo con las informaciones de prensa –dado que la Fiscalía no ha sido formalmente informada- en el día de hoy la Sección de Revisión del Tribunal para la Paz adoptó una decisión que desafía la evidencia aportada por Estados Unidos y por esta Fiscalía; hace trizas la cooperación judicial internacional; desdice de las obligaciones contraídas por Colombia en los tratados internacionales sobre la materia; confronta abiertamente la Constitución Política (art. 19, A.L. No. 1 de 2017) y, lo más grave, destruye la muralla que construyó el Acuerdo de Paz entre la reinserción y el narcotráfico, cuya promiscua relación constituye una amenaza para la democracia.

Este desafío al orden jurídico no puede ser refrendado por el suscrito. Mi conciencia y mi devoción por el Estado de Derecho me lo impiden. Por ello he presentado renuncia irrevocable al cargo de Fiscal General de la Nación.

Exhorto a la ciudadanía a movilizarse con determinación por el restablecimiento de la legalidad y la defensa de la paz, en un marco de justicia especial que exhale confianza 
para todos los colombianos y no para unos pocos y, particularmente, para todas las víctimas del conflicto.

NÉSTOR HUMBERTO MARTÍNEZ NEIRA

Sin embargo la noticia no concluyó allí, toda vez que la Vicefiscal General de la Nación, María Paulina Riveros, también renunció a su cargo, pese a que era la llamada a reemplazar a Nestor Humberto Martínez, mientras se elegía un nuevo fiscal. 

Por ahora entonces el cargo quedaría en manos del fiscal delegado ante la Corte Suprema, Fabio Espitia. 

Por ahora será el presidente Iván Duque quien tenga que presentar una terna ante la Corte Suprema, para que de allí salga el nuevo fiscal.