A pesar de las advertencias de las autoridades, la trata de personas no se detiene. El blanco principal siguen siendo las mujeres, quienes bajo engaños han terminado en distintos países del mundo –especialmente Panamá, China, el territorio de Hong Kong y Singapur–  lugares en el que son explotadas sexualmente. 

Este domingo la Dijin de la Policía reveló el caso de una colombiana que fue llevada con falsas expectativas laborales  a China. La joven vivió un calvario tras ser engañada por una compañera de estudios, terminó trabajando como prostituta, fue sometida a tener un promedio de 30 relaciones diarias. Su infierno terminó cuando pudo usar el teléfono celular de un cliente y dar aviso a las autoridades en Colombia. 

“El mensaje llegó a una de nuestras investigadoras, logramos contactarla y le dimos indicaciones para que se escapara y se presentara en el consulado de Colombia en la ciudad de Guangzhou. Instauró la denuncia y las autoridades la ayudaron a regresar al país. Las investigaciones continuaron y logramos rescatar a dos mujeres más”, señaló a Noticias Caracol, el general Jorge Luis Vargas, director de investigación criminal.

Para las autoridades este estremecedor relato fue una de las piezas principales para capturar a cuatro personas, quienes eran los encargados de captar a sus víctimas en el Eje Cafetero, engañarlas, realizar todos los trámites de documentación y sacarlas del país.

Tomado de El Espectador (ver nota original)