El caso que tiene preocupados a unos padres de familia de Bogotá, ocurrió en uno de los colegios del barrio La Gaitana de la localidad de Suba al occidente de la capital.

El pequeño de 13 años, fue golpeado brutalmente en varias ocasiones porque según versiones de la madre, el niño quien fue acusado de robarse unas chocolatinas dio a conocer el verdadero nombre del culpable.

Desde ese momento el acusado del robo se enfureció y en compañía de otro alumno comenzó a realizare el conocido bullying o matoneo. El agresor de 17 años, en compañía de otro estudiante de 14 comenzaron a golpearlo en repetidas ocasiones en el interior del colegio.

Los castigos siguieron y en una de esas agresiones, el estudiante de séptimo grado se cayó y se golpeó en la cabeza, pero el jovencito se quedó callado por miedo porque según versiones los malosos compañeros lo amenazaron de muerte si contaba lo que estaba sucediendo.

El afectado comenzó a tener fuertes dolores cabeza y sus padres preocupados por las afecciones, lo llevaron al médico donde logró descubrirle que tenía una infección interna en el cráneo debido a los frecuentes golpes.

El alumno fue remitido al Hospital de La Misericordia, donde ha tenido que ser sometido a varias intervenciones quirúrgicas. La criatura se encuentra en este momento en una de las Unidades de Cuidados Intensivos y su estado de salud es crítico.

Mientras esto sucede los dos alumnos siguen como si nada en el plantel educativo haciendo de las  suyas y sin recibir castigo alguno por parte de los profesores, quienes allegados cuentan que en el colegio conocen el mal proceder de los dos estudiantes.