En el municipio de Zipaquirá en el departamento de Cundinamarca, una mujer víctima de agresión física, verbal, psicológica y sexual mediante el uso de la fuerza por parte de su expareja sentimental puso en conocimiento el caso ante a la Policía Nacional, proceso adelantado en conjunto con la Fiscalía 02 CAIVA.

El hombre que la acosaba constantemente mediante llamadas telefónicas, decidió acudir a un encuentro con el agresor en el barrio Altamira y así finalizar su calvario.

Según el relato de la mujer a las autoridades, al llegar al lugar, el hombre la toma por el cabello y la lleva hasta una habitación donde la insulta y le empieza a dar golpes en la cabeza, cara, cuerpo y piernas, dañándole el celular y dejándola incomunicada.

La víctima informa que, momentos después la amenaza con un arma cortopunzante, diciendo que van a jugar a confesar la verdad y en caso de perder, la lesionada con el cuchillo, también la amenaza con asesinar a sus hijos, y la tortura prometiéndole que iba a salir muerta del lugar.

Esa misma noche, la obliga a recostarse junto a él en la cama, y pasar juntos las horas que restaban para terminar el día. Tiempo después, la víctima pierde el conocimiento y al despertar, le ruega que la deje ir, mientras que el hombre responde que si la dejará, pero antes de cumplir con su palabra la agredió sexualmente.

El sujeto capturado fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación.