La situación se registró el fin de semana en el casco urbano del municipio de Rioblanco, donde los integrantes de la estación de Policía de esa localidad tuvieron que salir a atender una riña que se estaba originando por un presunto exceso en el consumo de alcohol.

Fue así que al llegar los uniformados, varios ciudadanos se tornaron en una actitud agresiva en contra de los policiales, de tal forma que tuvieron que tratar de controlar los ánimos para evitar que la situación se saliera de control.

No obstante, mientras intervenían en el caso, varias personas pasaron el límite y empezaron las agresiones físicas en contra de los policías, por lo que se originó un forcejeo en el que los uniformados fueron superados en número.