El Abogado manifestó que el país se encuentra frente a una problemática social, que 'estalló' con la Reforma Tributaria y este detonante dejó entrever las necesidades existentes en materia de salud, educación, cultura, economía, entre otros en todo el territorio nacional.

Además, indicó que existe el imaginario de que empresarios, comerciantes y trabajadores son 'gente de bien', mientras que los jóvenes protestantes son vándalos, expresión a la que Vallejo respondió: "Yo conozco gente de bien en el barrio Chicó, la Cartagenita, Nuevo Armero, Nuevo Nazareth, el Bosque".

Por lo anterior, el profesional aseguró que todos los estigmas generan rechazos hacia las instituciones públicas, haciendo alusión a que en este momento la Alcaldía está blindada y no atiende a los ciudadanos; la Gobernación no responde las quejas y reclamos y, la Fiscalía por su parte, no responde los requerimientos de los denunciantes, razones suficientes para que la gente sienta desidia, odio y rencor hacia el Estado. 

El jurista también precisó la necesidad de dialogar con los participantes de las manifestaciones, pero en escenarios propios de las comunidades, razón por la que aseguró que lo ideal es concertar mesas de negociación en las 13 comunas. También se refirió al accionar de la Alcaldía y la Gobernación, catalogando el proceso como 'un problema de vanidades' y aunque resaltó el esfuerzo del mandatario departamental, Ricardo Orozco, sostiene que falló la logística y que la forma adecuada de escuchar las necesidades es convocar a los jóvenes en un lugar imparcial.

A su vez, se refirió a lo que realizan algunos funcionarios del gobierno: "Portela va a un barrio con 45 policías, cuando el interlocutor no es el Policía es el funcionario", razón por la que Wilson Vallejo expresó que lo idóneo es asistir a estos lugares con la Personería, la Defensoría del pueblo y hablar con los líderes de barrio, así como cuando buscan los votos, "Dejemos el cuento de que la envestidura nos pone en peligro".

También hizo un llamado a la Fiscalía para que sopese las acciones que adelanta en medio de este álgido momento, reconociendo que aunque existieron daños y vandalismo, en este momento se hace necesario limar asperesas y concretar espacios de diálogo entre autoridades y manifestantes.