Ciudadano denuncia que violentaron su carro en el parqueadero del Camarón Killero en Ibagué y no le responden
Yilson Saavedra, un ciudadano de Ibagué, denunció públicamente que su vehículo fue violentado mientras se encontraba almorzando en el restaurante Camarón Killero , ubicado en el sector del Poblado, en Ibagué. Según su relato, el hecho ocurrió el pasado 23 de noviembre alrededor de la 1:00 pm, cuando dejó su carro estacionado en el parqueadero del establecimiento y al salir encontró que el vidrio había sido roto y varios objetos personales robados.
Saavedra narró que entre los elementos hurtados se encontraban una computadora, dinero, papeles y llaves de una motocicleta, entre otros objetos. “Inmediatamente llamé a la administradora del restaurante, quien me manifestó que ya se habían presentado robos anteriormente, pero que no me iban a responder por el daño porque no es responsabilidad de ellos”, aseguró.
Además, el denunciante indicó que intentó llegar a un acuerdo con el propietario del restaurante, pero no obtuvo respuesta. "Les envié un PQR con copia a la Superintendencia de Industria y Comercio, pero hasta ahora no he recibido ninguna solución", afirmó.
Econoticias contactó a Jorge Reales, propietario del establecimiento, quien indicó que el incidente ocurrió en una zona de carga y descarga que no forma parte del parqueadero oficial del establecimiento. También recalcaron que existe un letrero visible en el lugar advirtiendo que no se hacen responsables por objetos dejados dentro de los vehículos.
“Sabemos que hay bandas delincuenciales dedicadas a abrir carros y por eso aclaramos que no somos responsables. Esto ocurre incluso en centros comerciales, donde tampoco asumen esa responsabilidad”, explicó el representante del restaurante.
El caso ha generado opiniones divididas entre quienes apoyan la denuncia de Saavedra y quienes consideran válida la posición del restaurante. Este hecho pone en evidencia la falta de garantías de seguridad en algunos establecimientos de la ciudad y abre el debate sobre la responsabilidad de los negocios frente a hechos que se registran en sus zonas de estacionamiento.
Por ahora, Saavedra espera que su caso sea atendido por las autoridades competentes y sirva como advertencia para otros ciudadanos.