La situación que le da la vuelta al mundo ocurrió en Georgia, Estados Unidos, el caso ocurrió en un restaurante de comidas rápidas al que delincuentes entraron y se llevaron la caja registradora.

Lo insólito es que el dueño de la empresa dedicada a la venta burritos, no presentó denuncia formal contra la personal responsable del hurto, sino que le ofreció trabajo.

En sus redes sociales el hombre mostró la foto del ladrón acompañada de un mensaje en el que le manifiesta que quiere que trabaje con él.

“Nuestros burritos son un éxito tan grande que la gente entra a las 4:00 a. m. para su dosis. Para el posible ladrón que claramente está luchando con decisiones de la vida o tiene problemas de dinero, por favor, pásese por una solicitud de empleo. Hay mejores oportunidades que este camino que ha elegido”.