30 años de cárcel por abortar tras violación
Una joven de 19 años de origen salvadoreño fue condenada a 30 años de cárcel, luego de que se practicara un aborto tras quedar embarazada por violación. La acción de la mujer fue calificada por un movimiento feminista como justa y ahora intentan ayudarla.
“La condena es injusta y la vamos a apelar. Este caso pone en evidencia el prejuicio que existe y con el que actúa el sistema judicial”, aseguró Morena Herrera, líder de la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del aborto Terapéutico, Ético, y Eugenésico, haciendo referencia al fallo emitido en contra de la mujer.
La joven, que era apenas una estudiante cuando fue abusada sexualmente, no quiso recurrir a la autoridades por miedo a que asesinaran a su madre como en repetidas ocasiones se lo advirtieron. Ahora recibe una condena sin ninguna prueba directa y “sin que el tribunal tome en cuenta los dictámenes de la Fiscalía”, aseguró Herrera.
“La han condenado solo con indicios y esto significa que no han aplicado el debido proceso. Un proceso justo hace que donde existe la duda razonable, esa duda debe estar a favor de la persona imputada, pero la jueza dijo que se trataba de un crimen familiar”, apuntó la líder.
Los hechos se presentaron el pasado 6 de abril de 2016, pero solo hasta este año se le dictó sentencia a la mujer. La joven de 19 años se encontraba en su casa, en la comunidad rural del municipio del Carmen, departamento central de Cuscatlán.
Entro al baño de la vivienda y parió a un bebé de ocho meses. La familia al ver lo que había hechos la llevó de inmediato al hospital donde le dieron aviso a las autoridades.
Según la policía, al ingresar a la casa, encontraron el cuerpo del bebé al que se el practicó la autopsia para comprobar los motivos y la edad exacta. Tenía 32 semanas y murió de “neumonía espiratoria”.
La defensa de la mujer manifestó que era un embarazo asintomático y por tanto el bebé había nacido muerto.