Aunque al momento no se presentan anomalías significativas, desde la Alcaldía Municipal, la oficina de Gestión del Riesgo y Parques Nacionales, se mantiene una vigilancia estricta para reaccionar ante cualquier cambio en la actividad del volcán.

Uno de los aspectos críticos en este plan de prevención es el estado de las vías de evacuación, fundamentales en caso de una eventual erupción. Actualmente, se requiere intervención en el corredor Villahermosa - Guayabal, una de las principales rutas de salida para más de 300 personas que tendrían que evacuar en una emergencia. La gobernación del Tolima ha priorizado este corredor y se espera la intervención de maquinaria para garantizar su transitabilidad.

En cuanto al acceso al volcán, las autoridades han sido enfáticas: el ingreso está prohibido. Sin embargo, se trabaja en estrategias de seguridad para garantizar que, cuando las condiciones lo permitan, las visitas se realicen de manera controlada y sin riesgos.

El llamado a la comunidad es a mantenerse informada a través de los canales oficiales y seguir las recomendaciones de las autoridades ante cualquier eventualidad. La prevención y la preparación son clave para proteger la vida y minimizar los riesgos en esta zona de alta actividad volcánica.