En la Casa de Nariño el presidente Gustavo Petro, posesionó este mediodía a Laura Sareabia como nueva ministra de Relaciones Exterior, en reemplazo de Luis Gilberro Murillo, quien renunció a su cargo la semana pasada.

Sarabia es la persona más cercana en el Gobierno al presidente Petro y llega al cargo en momentos en que se desarrolla un impasse diplomático con Estados Unidos que estuvo a tiempo de cerrar un serio problema económico y político.

En su cuenta de X la nueva Canciller escribió “Gracias presidente @petrogustavo, por su confianza. Asumo el honor de ser canciller con el compromiso de fortalecer nuestra política exterior, tender puentes y proyectar a Colombia con dignidad y liderazgo. Que el diálogo y la cooperación sigan abriendo caminos para nuestra nación”.

En la ceremonia en la que también tomó posesión como titular del Ministerio de Hacienda, Diego Guevara, quien venía en calidad de encargado desde la renuncia de Ricardo Bonilla, y de Jorge Rojas quien asume como director del Departamento Administrativo de la Presidencia, DAPRE, el presidente Gustavo Petro, arremetió de  nuevo contra la prensa por lo sucedido en medio de la crisis con Estados Unidos.

“Ojo, no solo defendemos nuestros intereses nacionales, sino que siempre, siempre, debemos defender nuestros intereses nacionales y los de la humanidad. Si la prensa cree que esto es borrachero, drogadicción, que lo piense, porque vive en una burbuja desde hace años, porque cuando era niño me lo decían, deben ser simplemente un apéndice de propaganda de la Casa Blanca, no deben ser comunicadores sociales”,  señaló el mandatario.

Petro en su intervención también habló de los colombianos deportados por el gobierno de Estados Unidos sobre los que aseveró que “Ya trajimos 42 niños. ¿De dónde acá el señor Trump me va a decir que 42 niños colombianos son delincuentes?. Veía que los blancos arios y los blancos arios colombianos que no son tan arios, estaban contentos... ‘sale esa chusma’. Delincuentes, dijeron”.

El jefe del Estado hizo un llamado a la unidad de América Latina frente al nuevo gobierno de Estados Unidos.