El turismo mundial ha logrado una recuperación sin precedentes tras la crisis de la pandemia. En 2024, el sector volvió a los niveles prepandemia con 1.400 millones de llegadas internacionales y un crecimiento del 11% respecto a 2023. Esta recuperación ha sido impulsada por la creciente demanda y la diversificación de experiencias que buscan los viajeros, consolidando nuevas tendencias que marcarán el rumbo en 2025. El sector avanza hacia un turismo más consciente y experiencial, con un énfasis cada vez mayor en la sostenibilidad. Hoy, el 83% de los turistas valora prácticas responsables y el 60,9% está dispuesto a pagar más por hospedajes ecológicos. También ha crecido el turismo de bienestar, enfocado en la salud mental, la longevidad y experiencias holísticas.

La tecnología y la personalización juegan un papel clave, permitiendo que la inteligencia artificial optimice itinerarios y presupuestos. Las redes sociales y los influenciadores influyen más que nunca en la elección de destinos, y el turismo multidestino gana terreno al ofrecer experiencias más diversas. Esto representa una gran oportunidad para países como Colombia, que pueden aprovechar su biodiversidad, gastronomía, cultura y aventura para atraer visitantes de todo el mundo.

Europa sigue liderando el turismo mundial con 747 millones de llegadas en 2024, mientras que México, España, Francia, Italia y Turquía se posicionan entre los países más visitados. Regiones emergentes como el norte de África y Centroamérica han mostrado un crecimiento sobresaliente, incluso por encima de los niveles previos a la pandemia. En América Latina, Colombia ha logrado consolidarse como un destino de referencia, con un récord de 6,7 millones de visitantes no residentes en 2024, un 8,5% más que el año anterior. La estrategia de promoción internacional y la diversificación de su oferta han sido claves en este crecimiento. Estados Unidos, México y Ecuador son los principales mercados emisores, pero persisten desafíos en infraestructura, conectividad y sostenibilidad. La tasa de ocupación hotelera, que se situó en un 50,3%, refleja la necesidad de fortalecer la competitividad del sector.

En cuanto a Colombia, el panorama se vuelve cada vez más atractivo. La Vitrina Turística de ANATO 2025 se consolidó como un escenario clave para la promoción del turismo con proyección internacional, buscando posicionar al país como un destino atractivo para visitantes extranjeros. La edición 44 de este evento, realizada en Bogotá entre el 26 y el 28 de febrero, reafirmó el potencial de Colombia y permitió fortalecer alianzas entre el sector público y privado. Uno de los anuncios más relevantes para el departamento del Tolima fue la transformación de las ruinas de Armero en el Bioparque Jardín de la Vida, un proyecto que combinará memoria histórica y turismo de naturaleza.

En este panorama, el Tolima e Ibagué se consolidan como destinos emergentes con un enorme potencial. La región ha ganado protagonismo con una oferta turística diversa que abarca naturaleza, cultura, turismo deportivo y el segmento MICE (Meetings, Incentives, Conferences and Exhibitions). Sin embargo, su consolidación como polo turístico requiere mayores inversiones en infraestructura, como la expansión hotelera, la construcción de un centro de convenciones de alto nivel, la creación de parques temáticos, el fortalecimiento del turismo deportivo y de salud, y el impulso del turismo rural comunitario de alto valor.

El liderazgo de la Gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, y del secretario de Cultura y Turismo, Alexander Castro, ha sido clave en la estrategia de posicionamiento del departamento. No obstante, es fundamental fortalecer la gobernanza turística con una articulación efectiva entre operadores, gremios y entidades públicas para garantizar un crecimiento ordenado y sostenible. Para consolidar el turismo en la región, es necesario mejorar la infraestructura y la conectividad, facilitar el acceso a destinos emergentes, fomentar la sostenibilidad, impulsar el turismo cultural y gastronómico resaltando productos emblemáticos como el tamal y la insigne Lechona Tolimense, fortalecer festividades municipales y festivales especializados, aprovechar la tecnología e incentivar la inversión privada para desarrollar proyectos innovadores y sostenibles.

El turismo es un motor clave del desarrollo económico y social. Tolima tiene una oportunidad única de convertirse en un referente turístico si se priorizan inversiones estratégicas y se articulan esfuerzos entre los actores del sector. Con visión y compromiso, el turismo puede consolidarse como un pilar de crecimiento para un departamento que busca diversificar su economía y generar nuevas oportunidades.