Directora del SENA Tolima renuncia por aparentes 'tentáculos' de Martha Alfonso en la entidad
La directora regional del SENA Tolima, Martha Lucía Ayala Jara, presentó su renuncia irrevocable al cargo por incomodo nombramiento en el que la representante Martha Alfonso, supuestamente, estaría detrás.
Ayala Jara argumentó que su decisión se debe, entre otras razones, a la reciente llegada de Óscar Rolando Castro como subdirector del Centro Agropecuario La Granja.
La funcionaria señaló que esta designación es contraria a toda lógica, línea ética y compromiso con el Gobierno Nacional, lo que la llevó a dar un paso al costado.
En su carta dirigida al director general del SENA, Jorge Eduardo Londoño Ulloa, Ayala Jara recordó que Castro ya había ocupado el cargo en los años 2021 y 2022, periodo en el que, según sus palabras, no logró gestionar adecuadamente el centro de formación y permitió la injerencia de intereses políticos en su administración.
Según la directora regional, una querella presentada por el sindicato SINDESENA, del cual hacía parte en ese momento, evidenció 45 irregularidades que afectaban el correcto funcionamiento de la institución.
Ayala cuestionó la supuesta intervención de una líder política en la región, a quien acusó de "negociar" el control del Centro Agropecuario La Granja a cambio de favores políticos, en lo que parecería ser una referencia a Martha Alfonso.
"Qué dolor doctor Londoño, que una Entidad con tanta historia, con gran arraigo popular, que le ha costado al pueblo colombiano recursos y luchas, sea ofrecida como un puesto de mercado, con las mismas estrategias que los políticos corruptos de siempre. Qué dolor que en un momento histórico como el de tener un gobierno alternativo, se propicien repartijas de poder, acuerdos oscuros por el manejo de las Entidades del pueblo colombiano", dice la carta.
Finalmente, la funcionaria subrayó que, durante su gestión, junto con su equipo directivo, trabajó por posicionar la entidad en el ámbito nacional.
Fuentes consultadas sugieren que esto es una prueba de que el propio SENA está intentando mantener el control de las direcciones regionales.
Esto se debe a que, si se acepta la renuncia de Ayala, deberá designarse a alguien de la misma entidad para ocupar el cargo mientras se adelanta el complejo concurso.