En los últimos años, el sector fintech ha experimentado una evolución y una transformación extraordinaria. 

Este avance, impulsado por la rápida innovación tecnológica y la demanda creciente de soluciones más eficientes, consolidó en 2024 dinámicas novedosas que están redefiniendo el futuro de la industria. Estas tendencias, no solo evidencian el ritmo acelerado de modernización en el sector, sino que también proyectan un 2025 con grandes oportunidades prometedoras.

La interoperabilidad ha sido clave para aumentar la utilidad del dinero digitalizado. En los últimos cinco años, millones de personas han pasado de usar exclusivamente efectivo a tener cuentas digitales y realizar transacciones electrónicas. 

Este cambio ha generado una segunda ola de beneficios para la sociedad: las personas ahora cuentan con un mayor historial financiero, lo que abre nuevas oportunidades para que las empresas ofrezcan crédito de manera más confiable, gracias a la disponibilidad de datos que antes no existían. Como resultado, se observa una tendencia clara hacia el crecimiento de productos financieros como tarjetas de crédito y préstamos en diversas modalidades.

Otra tendencia notable es la evolución de las empresas que comenzaron como fintechs, enfocadas en ofrecer experiencias de usuario exponencialmente superiores al status quo de los bancos tradicionales. Estas compañías están profesionalizando su negocio y obteniendo licencias bancarias que les permiten desarrollar una nueva gama de productos financieros.

Por otro lado, los bancos tradicionales no se quedan atrás. Están adoptando herramientas tecnológicas modernas que les brindan mayor flexibilidad y agilidad para responder a las crecientes expectativas de sus clientes.

La Inteligencia Artificial, IA, sigue creciendo aceleradamente: es una de las tecnologías que está revolucionando al mundo y también trae importantes impactos en la industria fintech permitiendo procesar grandes volúmenes de datos en tiempo real y acelerando significativamente la eficiencia operativa. Cabe destacar que la AI, no solo ayuda en la automatización de procesos, sino que contribuye en reducir costos en áreas clave, -como la atención al cliente- y favorece el desarrollo de nuevas soluciones. Estas, son algunas de las muchas posibilidades que aporta esta herramienta en un entorno globalizado y altamente competitivo.

“Somos protagonistas de estas tendencias trayendo a todo el mercado una solución que permite a cualquier empresa desarrollar sus propias propuestas financieras. Como referentes en el ecosistema regional, seguiremos marcando tendencia con innovación y propuestas que permitan acompañar las necesidades del mercado y de las personas”, explicó Hernán Corral, COO y Co Founder de Pomelo.

El sector financiero sigue demostrando que no hay límites para la innovación. A medida que la tecnología redefine los hábitos de consumo y conecta cada vez más a personas y empresas, las empresas del mundo financiero tienen la oportunidad de liderar un cambio positivo. La capacidad de adaptación, la flexibilidad y el impulso de la inclusión financiera será un desafío a sostener en 2025, con el fin de construir un ecosistema más accesible y dinámico, en beneficio de toda la sociedad.