Las obras de infraestructura que se van a llevar a cabo en la calle 60 de Ibagué continúan generando voces a favor y en contra. Algunos comerciantes insisten en manifestar que podría haber una grave crisis económica por la inminente reducción significativa de potenciales clientes.

Al respecto, el director de Fenalco Tolima, Cristian Gutiérrez, manifestó que ya fue levantada una "voz de alerta" al considerar que si bien no se oponen al desarrollo de la ciudad, sí resulta necesario que el proyecto no involucre un periodo muy extendido de ejecución.

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"La parte que nos preocupa, y ahí estamos muy alineados con los empresarios, es que se cumplan los tiempos estimados (...) es necesario decirles a los empresarios cuáles van a ser las verdaderas afectaciones y tener planes de choque porque sabemos que los que están más ubicados sobre las obras, posiblemente tengan afectaciones en sus ventas", sostuvo Gutiérrez.

Del mismo modo, manifestó que la Alcaldía debería garantizar una comunicación constante con el comercio y, ante una eventual extensión del tiempo de intervención, contemplar la posibilidad de garantizar descuentos para los empresarios.

"Sabemos que ocho meses es un tiempo bastante ajustado, evidentemente no podemos desconfiar de los contratistas e ingenieros, pero a veces suceden percances que pueden retrasar la obra", enfatizó el director de la Federación Nacional de Comerciantes en el Tolima.