La otra cara de la contratación de Carlos Vives y Manuel Turizo para el concierto en el estadio
Carolina Barrios, empresaria encargada de traer a Carlos Vives y Manuel Turizo para el Festival Folclórico de Ibagué, dijo a través de Econoticias que cerca de 2 mil personas estarán encargadas de la logística del concierto, pues el montaje de la tarima, del sonido y del piso protector del gramado son apenas algunas de las actividades que se tendrán que adelantar.
Según Barrios, pese a que se presentó una propuesta para que al menos los palcos fueran comercializados, el alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo insistió en que la oferta del concierto debía ser gratuita. Pero entonces, ¿una millonaria inversión de recursos públicos a cambio una noche de música en vivo?
La gratuidad del concierto pierde valor agregado cuando los recursos para su financiación salen del mismo 'bolsillo' de los ibaguereños a través del ejercicio tributario, y en cambio hubiera adquirido verdadero sentido de cero costo si el respaldo económico hubiera estado en manos de privados o por lo menos mediante un trabajo articulado entre ambas partes.
Así las cosas, la entrada libre termina convirtiéndose en un agente distractor de la fobia a la inversión de los privados, que han sido satanizados en la administración 'Por Ibagué con todo el corazon', al parecer siguiendo al pie de la letra las doctrinas radicales comunistas que encuentran en la inversión privada un 'eslabón capitalista opresor de la clase obrera'.
La distribución de costos
Según la empresaria, Carlos Vives costó $1.300 millones y Manuel Turizo costó $266.177.500, además de otros gastos representados en estampillas (3.5%), IVA (19%), entre otras exigencias de los artistas que quedaron contempladas en los contratos.
¿Estrategia del dedo?
Curiosamente la Alcaldía ya escogió cuáles son los medios de comunicación en donde se hará la promoción del evento, lo que no se conoce es bajo qué criterio se hizo la selección, pues hasta la misma Carolina Barrios se vio sorprendida con las designaciones.
La misma Carolina Barrios se mostró notablemente sorprendida al enterarse que emisoras como Ecos del Combeima, La Cariñosa y La Mega, todavía sin una explicación jurídica y legal, se quedaron por fuera del contrato publicitario pese a que superan ampliamente (con cifras oficiales) en audiencia radial, digital y de redes sociales a otros medios que curiosamente sí fueron escogidos.