Pasar al contenido principal
Econoticias y Eventos
Ibagué
COMPARTIR
Se ha copiado el vínculo

Dura carta a los concejales envió el ex alcalde de Ibagué, Rubén Darío Rodríguez

El dirigente político exhorta a los cabildantes para que no aprueben el proyecto que presentó la Alcaldía para menguar el impacto del predial en el año 2019.
Imagen
Crédito
Facebook / Ruben Dario Rodríguez
28 Sep 2018 - 7:59 COT por Ecos del Combeima

 

Con ocasión al debate en plenaria que se hará hoy, 28 de septiembre, en el Concejo de Ibagué, para analizar el cobro del impuesto predial para el año 2019, el exalcalde municipal, Rubén Darío Rodríguez, le remite una carta a los cabildantes para que le digan no a ese proyecto que presentó el gobierno de Guillermo Alfonso Jaramillo.  

El dirigente político afirma además que Jaramillo Martínez dejará el municipio sobre endeudado por falta de gestión ante el Gobierno Nacional.  

Carta abierta a los concejales de Ibagué:              

Quiero aclararles que no tengo ninguna aspiración política porque ya los Ibaguereños me han apoyado en dos oportunidades como Alcalde de Ibagué siendo el único reelegido.   Cuando el mandatario de los ibaguereños somete a su consideración la aprobación de un nuevo empréstito con destino a la terminación de los escenarios deportivos, quiero recordarles que en la posesión del director de Coldeportes Ernesto Lucena, el presidente Iván Duque reafirmó su compromiso de terminar la construcción de los distintos escenarios de Ibagué por lo que el alcalde debe dejar su facilismo acudiendo a empréstitos innecesarios que los pagará el pueblo ibaguereño y más bien acompañado de las fuerzas vivas y de los parlamentarios, hacer la gestión para que esa promesa del presidente se cumpla. No hay ninguna razón de seguir comprometiendo la capacidad de endeudamiento cuando los recursos hay que gestionarlos ante el gobierno nacional.            

Les recuerdo que cuando estuve por segunda vez como alcalde de los ibaguereños encontramos al municipio con un acuerdo de reestructuración de pasivos que nos limitaba la inversión y la capacidad de endeudamiento, pero pensando en ciudad y en su gente con paciencia cumplimos a través del secretario de Hacienda con los requerimientos, superando esa etapa que llevó a que la presidencia de Álvaro Uribe premiará a la alcaldía por el buen manejo de las finanzas municipales.

Esas limitaciones las obviamos haciendo gestión ante el alto gobierno logrando recursos para el acueducto complementario, subsidios para construcción de casi 5000 viviendas en Nazaret 1 y 2, la ceibita, Santa Catalina, los Álamos, el limón, dos de junio, la cima 1 y 2 y nueva Castilla, recursos para la ampliación de infraestructura educativa a través de la ley 21 y convenios con Invías y Gobernación del Tolima para la construcción de la segunda etapa de la avenida Cámbulos y Gualandayes desde Santana hasta enfrente de la bomba del Salado con andenes y ciclo rutas.

Además de los programas de familias en acción y los subsidios para el adulto mayor.                                              

No se compadece que por las actitudes individualistas del alcalde no haya aceptado los ofrecimientos del gobernador Oscar Barreto para invertir en el deprimido de la 60 y en vías y polideportivos de barrios como sí ocurrió con alianzas estratégicas de gobernadores con alcaldes de capitales como Villavicencio, Popayán, Cali, Tunja, Santa Marta entre otros.              

La capacidad de endeudamiento de un municipio no se puede comprometer casi en su totalidad porque se limitará la actividad de los próximos gobernantes.           Después de superar las limitaciones del acuerdo de reestructuración nosotros obtuvimos un empréstito por $25.000 millones aprobado por el Concejo entre los que estaban algunos de los actuales de los que se destinaron $7.000 millones para las viviendas, $11.000 millones para el acueducto complementario y otros para vías, educación, sector rural y deportes, pero le dejamos amplia capacidad de endeudamiento a la administración que nos reemplazó.

Hay que pensar en ciudad antes de complacer la ineficiencia del gobernante que muy seguramente acudirá a la mermelada para seguir hundiendo en caos a Ibagué. Recuerden que para algunos concejales que fungían en la época del traslado de recursos para los fallidos escenarios en el periodo anterior se les hicieron las advertencias que no fueron atendidas en su momento y ya sabemos lo que sucedió.                                          

Mi posición como siempre ocurre va a ser cuestionada por los amigos de la administración. Dirán algunos que no me pronuncié sobre lo que sucedía en la administración anterior, pero uno de los pocos que lo hizo junto a Fernando Varón, Humberto González, Eduardo Bejarano y algunos medios de comunicación fui yo, hasta el punto que se me formuló denunció penal por Injuria y Calumnia que fue resuelta a mi favor. Otros me tildarán de corrupto como cuando denuncie el interés politiquero de la consulta minera, pero tengo la tranquilidad de que siempre he obrado con honestidad y transparencia y nadie me puede señalar de haberme apropiado de recursos oficiales.

Sacaran otra vez el cuento de la avenida fantasma, que no es fantasma porque está construida y sobre la que se han tomado decisiones judiciales y disciplinarias siempre a mi favor.                                         

No me interesan los ataques que se vengan, no tengo ninguna aspiración política, solamente me mueve el futuro de la ciudad que me vio nacer, por eso acudo a su sentido común para evitar que se siga perdiendo la confianza en el Concejo y en la administración pública. No se puede premiar la falta de gestión de este alcalde que se quedó en anuncios, promesas y cortinas de humo. Piensen en ciudad y no en sus intereses personales ni en congraciarse con este mandatario que llevó a que Ibagué tocara fondo gestión es lo que exigen los Ibaguereños.