A pesar del buen clima en Ibagué, el secretario de Desarrollo Rural indicó que el municipio está en alerta amarilla por las fuertes lluvias que se están registrando desde el 31 de diciembre de 2017, agregando que siguen ayudando a la población afectada y a los cultivos ubicados en la zona rural.

“Hasta ahora tenemos 25 veredas afectadas en 8 corregimientos, donde la problemática más apremiante están sobre las vías terciarias, así como reporte de viviendas y cultivos golpeados por dicha situación, donde seguimos censando a la población por parte del Grupo de Atención y Prevención de Desastres, GPAD”, indicó Picón.   

Frentes de trabajo 

El secretario de Desarrollo Rural destacó que la Alcaldía de Ibagué tiene tres frentes de trabajo; uno ubicado en Charcorrico con dos kits maquinaria, ayudando a la carretera que conduce de San Francisco bajo hasta llegar a Charcorrico alto; el segundo está en la vereda La Montaña y el último en la vía que conduce de Coello-Cócora a Laureles, este con el apoyo del IBAL.  

“Es de recordar que por esta vía se está construyendo las redes de conducción del acueducto complementario, entonces con esta maquinaria que opera allí se está controlando la emergencia”.

Según el funcionario hay otros puntos que no son tan críticos pero que deben ser intervenidos como por ejemplo Potrero Grande, donde se espera ayudar a despejar la vía. Así mismo la entrega de ayudas humanitarias a la población de Charcorrico y El Cedral. 

“Vamos a seguir trabajando y articulando acciones con los organismo de socorro y entidades de apoyo para poder atención en este suceso que nos ocurre iniciando el año 2018, gracias a que el clima ha mermado las labores han sido satisfactorios”.