“Esto no puede seguir siendo una feria en que se presentan tantas cosas irregulares”: Jaramillo frente a licencias de urbanización
Esta semana se dio a conocerla suspensión de entrega de licencias de urbanización por seis meses para proyectos a desarrollarse en zonas surtidas por acueductos comunitarios, con el objetivo según funcionarios de la Alcaldía, de garantizar a los proyectos que se construyan un servicio de acueducto y alcantarillado optimo dado que hasta el momento se ha dado un crecimiento desorganizado en la ciudad que no garantiza ni continuidad ni la calidad del agua a estas comunidades.
Sin embargo se han conocido posiciones en contra dado que el reconocido abogado Wilson Leal analizó el decreto y determino que tiene falencias jurídicas que podrían ocasionarle al municipio sendas demandas.
El alcalde Guillermo Jaramillo se refirió al tema y explicó que antes de promulgar el decreto se sentó con Camacol para indicarle a sus directivas cual era el objetivo e indicó que en ningún momento se está frenando una construcción porque en todo el sector cobijado por el Ibal no existe ningún problema.
“Desde que tomamos el Ibal lo hemos hecho producir, el año pasado logramos hacerla producir 13 mil quinientos millones de pesos y para este año esperamos que sean 20 mil, en créditos tenemos 45 mil millones de pesos por la forma en que la hemos manejado”, apuntó Jaramillo.
Indicó que el municipio tiene que regular que las licencias que están entregando los acueductos comunitarios tengan la capacidad de surtir a los proyectos que se construyen en sus zonas de influencia pues ya se han presentado muchos casos en que la comunidad se ha visto afectada.
“Esto no puede seguir siendo una feria en que se presentan tantas cosas irregulares, lo que haremos es un control y si todo está bien no hay ningún problema, pero un acueducto comunitario no puede seguir dando agua si no tiene como cumplir, ninguno de esos acueductos cumplen con las normas a cabalidad y están entregando agua no potable”, afirmó el primer mandatario.
Aseguró que si la situación no se interviene serán los habitantes de estas zonas cuando los constructores hagan proyectos y no puedan brindarles agua por lo cual a futuro la Alcaldía tendría que enfrentar demandas por problemas creados por particulares.