En firme quedó millonaria sanción en contra del IBAL por la tercerización de los servicios comerciales. El Ministerio del Trabajo falló en segunda instancia en contra de la empresa de Acueducto y Alcantarillado, por tal motivo deberá pagar 322 millones 175 mil pesos a favor del Sena.

En la resolución número 0672 también se sanciona a la empresa Unión Temporal Servicios Comerciales a pagar 161 millones también con cargo al Servicio Nacional de Aprendizaje Sena.

Para esta sanción fue fundamental la denuncia que hicieron los integrantes del sindicato de tercerizados de la empresa.

A finales del 2013 Ecos del Combeima denunció cómo se quería entregar el contrato a la compañía Presea para el manejo de los servicios comerciales que al final fue adjudicado trayendo serios perjuicios a la empresa. 

“En Ecos del Combeima y desde muchas tribunas denunciamos cómo se le quería meter la mano al bolsillo al Ibal y la ciudad porque esto  violaba los derechos de los trabajadores como finalmente lo comprobó la sanción del Ministerio, lo que no se entiende es por qué se han demorado tanto en estructurar lo que falta de la planta de personal, esto incide negativamente en las utilidades de la empresa porque cada vez que se tercerizar hay que pagar costos extras”, explicó Eduardo Bejarano. (Lea también ¿Por qué el Ibal no debió tercerizar todos los servicios comerciales al consorcio Presea Ibagué?) 

El analista además agregó que muchas veedurías funcionan según sus intereses e indicó que el Ibal ha sido por mucho tiempo ‘La vaquita lechera’ de José Alberto Girón primero como contratista y ahora como gerente. 

“El señor sale a decir a decir que hay utilidades nunca antes registradas pero lo que no le dice a la opinión pública es que subió la tarifa, estas veedurías de bolsillos pululan en toda la ciudad y se dedican a defender negocios que les han resultado rentables por muchos años”, afirmó Bejarano. (Lea también Ferro se destapó y confirmó que Girón le comentó que podía ser gerente del Ibal días después de las elecciones que ganó Jaramillo)

Es muy grave que las veedurías en Ibagué presionen con denuncias solo cuando están en busca de un contrato y una vez lo obtienen simplemente miran para otro lado y dejan de ser críticos. 

“Hay mucha suspicacia e indicios que podrían llevar a pensar que Findeter está metido en una maraña de Odebrecht- Prieto de recursos que le entregan para que se les den a los municipios pero los opera ella misma, hay que investigar a profundidad si existe un cartel de Findeter en Ibagué porque me genera mucha suspicacia que cuanta cosa se quiera contratar en la ciudad para posar de transparencia se dice que es vía Findeter y la mayor transparencia son las licitaciones”, comentó Eduardo Bejarano.