“Si el Gobierno no la acepta utilizaremos otros medios para hacer cumplir la decisión de Cajamarca porque Colombia no es una dictadura minera”: Robinson Mejía
El pasado 26 de marzo se realizó en Cajamarca la consulta popular minera la cual alcanzó el umbral y ganó el No con un abrumador porcentaje.
Tras el triunfo de los ambientalistas el ministro de Minas y Energía, Germán Arce, realizó unas declaraciones ante los medios nacionales en las cuales deslegitimó el valor de esta decisión y aseguró que pese a la voluntad del pueblo de Cajamarca el proyecto minero de La Colosa podría seguir su curso.
El ministro incluso fue más allá y aseguró que el pueblo de Cajamarca y el Tolima entero, han confundido el daño que hace la minería ilegal y la han asociado con AngloGold Ashanti y que pese a que habrá un impacto ambiental este no será tan negativo como aseguran los ambientalistas pues para eso se realizan estudios de mitigación de impacto ambiental y se concertan con la autoridad ambiental.
Estas declaraciones han generado un gran malestar no solo en Cajamarca sino en todo el país, pues la comunidad se siente burlada ante las declaraciones de Arce y por parte del Gobierno al desconocer el peso de decisión tomada en las urnas a través de la Consulta Popular Minera.
Para Robinson Mejía, miembro del Comité Promotor de la consulta, ésta es vinculante y tiene repercusiones sobre el proyecto minero de La Colosa, afirmó que en su visita al programa en vivo de Semana pudo demostrar que AngloGold Ashanti en este momento no tiene derechos adquiridos por lo cual para asegurar que el proyecto no es tocado por la consulta deben presentarse muchas situaciones.
“Si el Gobierno decidí no aceptar el resultado de la consulta popular en Cajamarca, tendremos que utilizar otros medios como una acción de tutela o cumplimiento para garantizar que lo que decidió el pueblo sea respetado y sea reglamentado sin demora ni traba alguna”, afirmó el ambientalista.
Además agregó que Colombia no es una dictadura minera sino un Estado Social de Derecho por lo cual esperan que el Gobierno acepte lo que sucedió en Cajamarca porque de lo contrario se estaría pasando a un conflicto entre la comunidad y la multinacional.