El reconocido estructurador de proyectos afirmó que soñar en grande todavía se puede en el Tolima y comentó que este proyecto es una oportunidad de unir al departamento en torno a algo que traerá desarrollo. En este proyecto participan los alcaldes de Ibagué, Murillo, Líbano, Anzoátegui, Santa Isabel y los presidentes de las Cámaras de Comercio de Ibagué y de Honda. 

“Esto ha gestado la asociación de estos cinco municipios pero ha generado un movimiento más grande donde se pretenden asociar todos los municipios del Norte del Tolima en torno de más proyectos, este proyecto es de talla mundial y tendrá una inversión muy alta, estamos apuntando a un Plan Norte porque este sector ha sufrido tanto conflicto como el Sur”, explicó Vargas. 

El ex director de Fenalco explicó que la idea surgió luego de analizar la situación del Cañón del Combeima en donde no es posible construir un cable por razones técnicas y económicas, el senderismo o la ciclo ruta son alternativas no factibles para todas las personas,  por lo cual luego de revisar a nivel mundial proyectos similares encontró un ejemplo en Francia donde un pequeño tren de montaña funciona para transportar turistas.

“El nuestro sería de carga y pasajeros, lo interesante es que los niños utilizan mucho este tipo de transporte y ellos vienen con su familia y es como más nos conviene que vengan para mover el turismo, el área de influencia inicia en el Salado en la parte que va hacia San Bernardo por lo cual se necesita reglamentar el uso del suelo de manera adecuada”, indicó Vargas. 

Un punto muy importante es que este proyecto está encaminado en rebajar los costos de la canasta familiar en toda la región, además se deberán fortalecer los centros de salud, restaurantes, hoteles, centros recreativos y todas las entidades que intervengan para brindar un gran producto turístico a los visitantes. 

César Augusto Vargas además comentó que en un planteamiento inicial se piensa que serán cerca de 150 kilómetros de recorrido que podrían costar 300 millones dólares por lo cual una APP con recursos privados podría darle viabilidad. 

“Se necesitarán tres cierres: financiero, técnico y jurídico, en los últimos dos no veo problema la cuestión es el dinero pero ya hemos hecho algunas simulaciones y si bien no es de una rentabilidad extraordinaria si se pueden recuperar los recursos de manera segura a 20 años, será un tren moderno que puede transportar la carga de manera refrigerada y se debe recordar que las cosechas de tierras calientes tienen un gran valor en las ciudades frías”, comentó César Augusto Vargas.

Hace más de 20 años el ex director de Fenalco proyectó el Cable de Ibagué, sin embargo no ha sido posible implementarlo en la ciudad después de dos décadas, en este sentido afirmó que “con este proyecto si ha pasado mucho tenemos un estudio de prefactibilidad además de 5 empresas nacionales e internacionales vinculadas a través de una carta de intención, tenemos a las dos principales empresas constructoras del mundo una de ellas acompañada de la constructora Colpatria con cartas de intención ante la Alcaldía, lo que pase en adelante depende de muchos factores. En la primera etapa iría desde el Parque de la Música al Ricaute y la Variante, este proyecto costaría alrededor de 36 mil millones de pesos hace muchos años, para este año podría hablarse de 65 mil millones de pesos”. 

El reconocido líder gremial rememoró que en el año 1.972 se construyó el barrio Fenalco por lo cual no es imposible soñar con construir nuevamente para los comerciantes, “cuando hicimos lo de la calla 14 nadie nos creía porque teníamos 150 afiliados y teníamos una situación crítica, recibí a Fenalco en el 1.994 y lo entregué con un superávit tan amplio que se logró comprar la casa de Cádiz y además con más de 500 afiliados, estos resultados nos hacen ver que en el Tolima si podemos hacer cosas grandes”. 

Por último le envió un mensaje al nuevo director de la Aeronáutica y le indicó que “quiero decirle a Alfredo Bocanegra que se comprometa con Ibagué no solo con un aeropuerto nacional sino con uno internacional porque el proyecto de tren de montaña atraerá a miles de turistas extranjeros y no podemos seguir pensando en que lleguen a Bogotá”.