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“Para la aprobación final de los Pliegos Tipo falta la conciliación de Cámara y Senado”: Óscar Ortiz

En plenaria de la Cámara de Representantes fue aprobada esta decisión para que las entidades públicas liciten sus contratos bajo esta modalidad y eliminar la posible corrupción que se tiene en estos procesos.
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23 Nov 2017 - 8:28 COT por Ecos del Combeima

Luego de cuatro debates fue aprobado por la Cámara de Representantes el proyecto de Ley de Infraestructura que regula  los procesos de contratación en el país. En esta oportunidad entra en vigencia los Pliegos Tipo que ayudarán a las buenas prácticas de los gobiernos  en los proceso de contratación de obras públicas. 

Sobre estas decisiones habló el Óscar Ortiz, ex secretario de la Transparencia en el gobierno del expresidente, Álvaro Uribe Vélez, manifestó  frente a este tema que “este es un proyecto de ley que está pendiente aún por conciliar  entre Cámara y Senado, que introduce unas modificaciones en contrataciones de infraestructura, entre ellas los Pliegos Tipo”. 

Explicó que su paso por el gobierno en la lucha contra la corrupción del país, como Secretario de la Transparencia, encontró muchos contratos que se diseñaban en sus pliegos para que le sirvieran a un único proponente, ya sea una empresa natural o jurídica.

“A ese tipo de contratos los llame los pliegos de sastre, por qué primero son diseñados a la medida no del interés público sino de un único oferente, es decir, que las otras personas que contratan con el estado no le quedaba bien el traje, pero también de sastre por el daño que hacían o que hacen porque por una parte desprotege el interés público en la medida de que un proceso que se supone que es competitivo pues favorecería al contratado que es el estado, quien contrata con los impuestos de las personas  como producto de su trabajo”.  

Agregó además que este tipo de proceso no perjudicaba solo a las personas que se quedaba por fuera como oferentes sino que afectaba al público en general, “ya que de esa manera no se obtienen los mejores bienes o servicios a los mejores precios, se burla  una condiciones para tener los mejores bienes y servicios y los mejores precios que es la competencia”.

Con respecto a quiénes se quedan con el ´traje´ en palabras de Ortiz, son hechos a las medidas por los contratantes, “es una arbitrariedad que se ejecuta fundamentalmente impulsado por un interés inmoral e ilícito, es un beneficio prohibido de tipo económico y político”.   

¿Cómo es el proceso de contratación?

Con una explicación muy clara el exsecretario de la Transparencia, puntualizo que “el proceso de contratación tiene unos pasos que permitían desde los pre pliegos deliberar, discutir, poner en público las razones para detectar y hacer visibles ese tipo de medida para que le sirviera a un solo oferente y dejar por fuera a los otros interesados en algunos cosos esas etapas precontractuales servían para conducir a la revocatoria de los proceso de contratación en esas condiciones o para que se corrigieran las características que les daban esa identidad de pliego de sastre, pero en muchas oportunidad esa posibilidad de corrección no eran acatadas por las administraciones en cuanto a su interés estaba promovido por un asunto de corrupción”.   

El exfuncionario espera que con esta medida sean más objetivos, neutrales  y competitivos los procesos de contratación, resaltó que el la ley todavía debe pasar por la etapa de conciliación con la Cámara y Senado y después se puede aplicar. 

Sentenció que incluso con la aprobación de la ley no se garantiza el éxito, por eso dijo que se debe estar atento de los nuevos pliegos, “desde su molde o confeccionamiento sean hechos a la medida para otras personas o empresas reducidos en un mercado determinado”.  

Óscar Ortiz enfatizó en que se han avanzado en algunos casos por parte de Planeación Nacional en la ejecución de proyectos tipo, “son los que resuelven en ultimas como se hacen las planchas o el polideportivo promedio para un municipio colombiano, esto permite ahorrar en costos de diseños y estudios, son buenas ideas pero deben contar con una buena ejecución, por eso los nuevos pliegos al ser ahora generalizado tendrán que ser sometidos a un escrutinio de la opinión pública, de los distintos mercados, desde los distintos tipos de tamaño, tampoco hay que desconocer la economía y que gane siempre el factor financiero eso sería poco transparente ya que protegería al que tiene más capital y no al que hace mejor el oficio”.  

¿Quiénes deben hacer los Pliegos Tipo?

De acuerdo a Ortiz, los Pliegos Tipo debe ser estructurados por Colombia Compra Eficiente, Planeación Nacional y los órganos de control, por eso invita que todas las personas estén atentos de las acciones que se tomen alrededor de ellos. 

“Va hacer como si fuera una determinación final de los contenidos y característica de los distintos Tipo de Pliego, por eso debe pasar por muchos filtros y discusiones, esto ayudará a una selección de bienes adecuada y como segundo otorgará las exigencias en relación con los oferentes, para que se puedan comprobar y dar los resultados que promete esta figura”.

Sobre el Ibal  

Óscar Ortiz conoció a través de Golpes de Opinión de Ecos del Combiema, el proceso de licitación por más de $27 millones que adelanta el Ibal para ejecutar la primera etapa de la segunda fase del acueducto complementario en Ibagué, ya que al parecer la empresa ibaguereña es excluyente con las personas que participan en este proceso licitatorio, ya que existe un ítem donde solicita que la compañía que no solicite anticipo le dan en la calificación 10 puntos adicionales,    con respecto a eso dijo que “que se debe analizar el caso concreto, pero dice que con solo el enunciado llaman mucho la atención, en esa caso si las reglas con claras y el acueducto de Ibagué cuenta con los fondos suficientes, lo sustancial es el objeto a contratar más que las condiciones financieras, yo creo que es mejor contar con un mayor número de buenos oferentes en el saber qué hacer y con unas mínimas condiciones financieras y más bien que se compitan con el precio más que estimular el capital con el que ya cuenta una empresa, que se supone pone una condición restrictiva para otras empresas”.