Con la inversión de 40 millones de dólares, la empresa Justo & Bueno busca salir avante de las dificultades económicas que atraviesa tras la pandemia por coronavirus y que afectó considerablemente el pago a los proveedores.

Con esto, la compañía entró en un proceso de reorganización con el que buscan que la empresa continúe la operación de las más de 300 tiendas que se encuentran distribuidas en todo el territorio nacional.

"Son varios los inversionistas interesados en apostarle a la compañía, ya lo han hecho. Por razones de confidencialidad no se pueden revelar detalles, pero todo va a constar en los expedientes judiciales del proceso de reorganización de la Superintendencia de Sociedades", expresó Nicolás Polanía, apoderado de Justo & Bueno.

Así mismo, se refirió a la inversión realizada por los nuevos socios: "estamos hablando de alrededor de 40 millones de dólares, con los que se busca reactivar la fuente de pago, es decir, mantener la empresa en marcha para que sirva para pagar el pasivo reorganizable de la compañía".

Igualmente, mencionó que la compañía presenta deudas por alrededor de los 1.2 billones de pesos, motivo por el que a través de esta inyección de capital se pretende "abastecer las tiendas y asegurar el flujo de caja para que la operación sea sostenible mientras se logra el acuerdo de reorganización", manifestó Polanía.

Además agregó que, los proveedores han acompañado a la empresa como su principal canal de distribución y por lo mismo, se espera con este proceso es que se logren las soluciones financieras y asegurar el pago a todos los acreedores.