Mientras la Cámara de Comercio de Ibagué pretende vender la icónica Casa del Tolima en Bogotá, el gobernador Ricardo Orozco anuncia su traslado a la Casa de Risaralda, en convenio con la RAP del Eje Cafetero.

"Hemos acordado un convenio con la Gobernación de Risaralda, para que la Casa del Tolima funcione donde hoy funciona la Casa de Risaralda, que tiene unas amplias locaciones muy bien ubicadas en Bogotá que, sin duda, servirán para fortalecer, promover y adelantar acciones conjuntas en la promoción de nuestro territorio, especialmente en la constitución de un gran centro de negocios internacional, que servirá para la promoción y comercialización de los cafés especiales de exportación de Tolima y Risaralda", indicó Orozco.

Por esa negociación, varios tolimenses ilustres están muy molestos.

"La Cámara de Comercio de Ibagué se equivoca si vende el inmueble del barrio La Merced. Si la Gobernación no es el aliado adecuado, deberían buscar otros entre el sector gremial y empresarial. El cierre de la Casa del Tolima es una malísima noticia y comprueba que carecemos de sentido de región. No podemos seguir viviendo entre la desidia y la falta de grandeza. Aún estamos a tiempo de corregir esta equivocación", plantea en su columna de El Nuevo Día, Guillermo Pérez Flórez.

Desde la época de Óscar Barreto, la Casa del Tolima fue tomada en comodato por la Gobernación del Tolima a la Corporación Cívica Empresarial, una entidad sin recursos que integran los miembros de la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Ibagué.

El lío se originó por el no pago a tiempo de impuestos por parte de la Administración Barreto y la posterior terminación del contrato en la era Orozco.

Hoy, la Casa del Tolima del barrio La Merced, al parecer, se encuentra postrada en estado de abandono. No volvió a ser la sede de los tolimenses de todas las esferas sociales y políticas en la capital del país, en manos de las actuales mayorías de la CCI, casi la misma directiva que compró un lote en L al frente del cementerio de Picaleña en el año 2012 por $400 millones. sin que hasta hoy haya un solo ladrillo de este fallido proyecto. 

La misma que le entregó al presidente ejecutivo, Brian Bulla, una prima navideña de casi $40 millones hace aproximadamente un año, en pleno segundo pico de la pandemia del Covid-19, por una supuesta superlativa gestión inexistente en el ente gremial, pues la CCI depende aún, y como ha sucedido a lo largo de varios lustros, del ingreso público en un 90 por ciento.

La misma que, según otro medio de comunicación, pretende comprarle a Seguros Bolívar dos pisos y un mezzanine del antiguo edificio empresarial de la Calle 10A con Carrera Cuarta, en vez de proyectar un gran centro de capacitaciones en la zona de desarrollo de Ibagué, pues ya se cuenta con una muy buena sede administrativa de casi 30 años en el centro de la ciudad.

El gobernador del Tolima y la actual directiva de la CCI han sido muy cercanos, pues es bien conocida su amistad con algunos directivos y convenios entre ambos. 

Llama la atención que para este caso curiosamente no se pusieron de acuerdo y la Gobernación del Tolima opta por ‘arrimarnos’ a una Casa de Risaralda prestada para nuestro departamento, cual convidados de piedra y so pretexto de pertenecer a la RAP del Eje Cafetero, la misma que se prestó para llevar hace unas semanas a unos destacados empresarios a Dubai, entre ellos al yerno de Brian Bulla con su firma, Juan Choconat.

Sobre esta polémica decisión, la Cámara de Comercio de Ibagué, se pronunció a través de un comunicado de prensa, y señala que el Gobierno Departamental le adeuda más de 128 millones de pesos por arrendamiento.

"Dicho bien, había estado en comodato bajo el uso de la Gobernación del Tolima por más de ocho años, ente Territorial que estaba a cargo del pago de servicios públicos e impuestos, aspectos que quedaron especificados en el comodato de la época. En el año 2019 se cambió la modalidad de comodato, a contrato de arrendamiento, y bajo ambas modalidades, la Gobernación del departamento debido a diversas situaciones administrativas no logró cumplir con lo pactado. Así que a la fecha adeuda a la Cámara de Comercio de Ibagué más de $128.000.000 por concepto de cánones arrendamiento. El no pago de estas y otras obligaciones por parte de la Gobernación, es la razón por la cual la CCI tiene en marcha un proceso de reclamación ante la Procuraduría. En aras de no seguir generando deuda, la Gobernación del Tolima, en el mes de septiembre del año 2020, entregó al Ente Cameral la vivienda, dando por entendido que no usaría más el bien inmueble".

Agrega el pronunciamiento de la CCI que "es importante indicar que durante el tiempo que la Gobernación hizo uso de este bien, lo referenció como Casa del Tolima. Así que desde la CCI hacemos la claridad, que este término es simbólico y nada tiene que ver con el lugar físico como tal, dando por entendido que la Casa del Tolima puede funcionar en cualquier otro bien inmueble".

De igual forma, aclara que "una vez recibida la vivienda, la Cámara de Comercio de Ibagué pagó por el avalúo y peritaje, para conocer el estado en que había sido entregado el mismo, evidenciándose daños que fueron ocasionados por el desgaste natural debido al uso que se le venía dando. Este avalúo arrojó que las intervenciones estructurales tienen un costo de $200.000.000".