El turismo es un sector muy importante para cualquier país ya que mueve diferentes sectores como el de los restaurantes, transporte y hoteles, sin embargo este último se ha visto seriamente afectado en los últimos años por la creciente oferta de plataformas  que ofrecen alternativas de hospedaje mucho más económicas, esto puesto debido a que no pagan ningún tipo de tributación.

Dos de las más populares son Booking y AirBnb las cuáles ofertan apartamentos e incluso habitaciones en casas de familia para que los viajeros puedan hacer uso de ellas a un precio muy reducido al comparar con un hotel.

Por supuesto esto representa una gran desventaja para los empresarios que se dedican a la hotelería porque compiten de forma desigual, mientras ellos deben pagar impuestos, empleados y todas las demás obligaciones que se generan en un hotel formal, quienes se ofertan en estas plataformas lo hacen sin ningún tipo de restricción u obligación.

Ante esta necesidad el gobierno de Iván Duque decidió implementar una reglamentación a través del decreto 2119, el cual busca poner en cintura a quienes usan las nuevas plataformas para alquilar sus propiedades, incluyendo una nueva categoría al servicio de alojamiento denominada ‘hospedaje turístico no permanente’.

Con ello quedarían incluidos todo tipo de lugares que se oferten para prestar servicios de alojamiento ya sea en su totalidad o por habitaciones.

Por tanto para seguir prestando el servicio deberán sacar un Registro Nacional de Turismo y renovarlo cada año, tal y como lo hacen todos los prestadores de servicios turísticos formales del país.

Esto también implica que deberán entrar a pagar los impuestos que corresponde a este tipo de actividades, con ello se pretende que cera de 5 mil personas que vienen utilizando esta modalidad entren a la legalidad y así se equilibre el abismo de precios que existe entre unos y otros.

Si bien esto representa un fuerte impacto económico para quienes venían prestando este servicio de forma informal, el gobierno ha explicado que la medida busca proteger tanto a los empresarios formales como a los turistas, dado que estos últimos no tienen herramientas en estos momentos para denunciar en caso de ser estafados.