El viceministro de Desarrollo Empresarial de Colombia, Saúl Pineda, habló en Econoticias sobre las oportunidades del Tolima en el contexto económico.

Juan Pablo Sánchez: ¿Cómo lograr trabajar en competitividad, productividad, emprendimiento, crecimiento económico y equidad?

Viceministro: El Tolima es uno de los departamentos con mayor potencial de desarrollo y por eso fue una de las primeras visitas que hicimos en estos diálogos empresariales que estamos construyendo desde las regiones con el liderazgo del ministro.

Buscamos un desarrollo incluyente que vincule a las pequeñas y medianas empresas, fue un momento propicio para escuchar las preocupaciones de los empresarios frente a temas como el contrabando.

Juan Pablo Sánchez: La Universidad del Rosario mide los índices de competitividad de los departamentos y ciudades de Colombia ¿Se está realizando este ranking actualmente?

Viceministro: Me siento muy satisfecho de haber tenido la oportunidad de construir desde la Universidad bajo el liderazgo del rector José Manuel Restrepo, esta alianza con el Consejo Privado de Competitividad para construir desde el 2013 el indicador de competitividad departamental que mide en la actualidad a 25 departamentos y Bogotá.

Hemos tenido la oportunidad de seguir muy de cerca la evolución competitiva del Tolima e Ibagué, lo cual nos permite en este ejercicio de servicio público unas buenas cifras para trabajar con la Alcaldía, la Gobernación y los empresarios de la región, las acciones que requiere el departamento para consolidar su desarrollo en los próximos años.

Juan Pablo Sánchez: ¿Por qué hay ciudades más pequeñas que superan a Ibagué en competitividad?

Viceministro: El balance del Tolima e Ibagué resulta desafiante en la medida que es una región que por estar en el centro del país, en la región más dinámica de Colombia, tendría enormes oportunidades para crecer.

Hay que señalar que el departamento e Ibagué vienen avanzando significativamente en el indicador de educación básica y media, en la actualidad el departamento está en la posición 9 y la ciudad en la posición 7, esto es una buena noticia.

En el frente de la productividad tenemos que decir que si bien se ha presentado un crecimiento importante en la sofisticación y diversificación de mercados, es evidente que el departamento tiene un gran desafío para lograr mejorar la productividad y se logre inclusión de las medianas y pequeñas empresas tanto en el mercado nacional como internacional, aprovechando el turismo y la agroindustria.

Jorge Palacios: Ibagué se ha convertido en un centro de sobre diagnostico ¿Qué hacer para ejecutar lo proyectado?

Viceministro: Una de las realidades que nos encontramos es que Ibagué cuenta con un montón de análisis muy pertinente sobre su desarrollo productivo, hay un ejercicio de competitividad desde la Alcaldía, la Gobernación, la Comisión Regional de Competitividad, pero es probable que desde las inastitucioens locales se tiene una obligación para que los diagnósticos se concreten.

Hemos tomado la decisión a partir del dialogo tan productivo que tuvimos de avanzar en los temas que son prioritario para pasar de los diagnósticos bien hechos a las acciones sostenibles.

La buena noticia es que ya hemos retomado los buenos diagnósticos para que de forma alianza entre las instituciones locales y el Gobierno se logre mover la aguja de la productividad en la región.

Juan Pablo Sánchez: Findeter realizó el estudio Ibagué Sostenible 2037 pero solo se tuvo en cuenta la agroindustria, logística y ecoturismo pero ignoraron los textiles, la economía naranja, las TIC y se ignora la sofisticación e innovación empresarial.

Viceministro: Cuando se miran los puntajes de sofisticación e innovación no resulta estimulante estar en la posición 15 estando en una región que viene aumentando sus niveles de inversión y está aprovechando su posición en la región central, esto señala que hay desafíos importantes en cuanto a mejorar la producción con procesos de industrialización que nos lleven hacia mejores lugares en el mercado interno e internacional.

Lo primero que hay que hacer es fortalecer los sectores tradicionales como la agroindustria y el sector textil, pero también hay que avanzar en la economía creativa como la tecnología y la economía naranja.

Creemos que podemos lograrlo si hay una voluntad por parte de los mandatarios para trabajar con los empresarios.