Esta mañana la W Radio dirigida por el reconocido periodista Julio Sánchez Cristo se enlazó con nuestra emisora tras conocer el polémico tema del volcán Guacharacos y el proceso de urbanización que se viene adelantando en sus laderas con el proyecto “Las Juanas”. 

En la entrevista participó además el secretario de Planeación Municipal, Camilo Clavijo, quien sentó la posición de la Administración frente al tema. 

Guacharacos: el volcán relegado por la Administración 

Desde hace 17 años cuando se abrió la primera variante de Ibagué la cual comunica a Bogotá con el occidente del país, se descubrió que había una estructura volcánica que en su momento nombraron como  Guacharacos pero infortunadamente en el POT del año 2000 no fue incluido ni señalado decisión que hasta ahora no resulta clara.

En ese momento el secretario de Planeación era Javier Humberto Arbeláez, quien hoy curiosamente está solicitando licencias de parcelación de 10 casas por hectárea en otro proyecto en la misma zona.

Dentro de la investigación se descubrió que el volcán monogenético Guacharacos es una estructura del paleolítico que fue cartografiada por el geólogo Alberto Núñez que en ese momento trabajaba en Ingeominas, sin embargo el director de Cortolima de ese entonces José Edgar Bonilla tampoco lo incluyó en el año 2.006 en la actualización del POMCA Coello. 

No conforme con las anteriores omisiones de este volcán monogenético,  en el mes de diciembre del año pasado se firmó por Decreto el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial de Ibagué el cual se ha tornado polémico por algunos vacíos en el texto que estarían permitiendo proyectos de parcelación en las laderas de los Cerros Tutelares, lo cual bajo la opinión de diferentes personalidades y expertos en el  tema resultaría sumamente perjudicial para el equilibrio ecológico de las montañas que nutren de recursos naturales a Ibagué. 

Los misteriosos 'lapiceritos traviesos' del POT 

Siendo la ciudad una meseta que cuenta con vastas zonas planas que podrían servir a la perfección para proyectos de urbanización resulta complejo que algunos constructores pretendan, seducidos por la belleza de las montañas, llevar estos proyectos de construcción a zonas rurales que hasta ahora se venían explotando únicamente a través del agro y del ecoturismo, los cuales siempre han respetado el uso del suelo y la protección ambiental de la zona. 

El director de Cortolima Jorge Enrique Cardoso denunció que existen algunos ‘lapiceritos traviesos’, por parte de abogados y topógrafos en la secretaría de Planeación quienes estarían interesados en burlar la concertación ambiental entre la Alcaldía y la máxima autoridad ambiental del Tolima, dado que en ningún momento Cortolima estuvo de acuerdo en que se realizara parcelación en zonas de mitigación de impacto y tampoco la construcción de vivienda campestre en las laderas de los Cerros Tutelares. Por otra parte el curador urbano 2 otorgó licencias de parcelación en las laderas de uno de los domos del volcán Guacharacos para el proyecto ‘Las Juanas’, sin embargo ante las denuncias de Ecos del Combeima, Cortolima selló de manera provisional debido al daño al medio que se evidenciaron en una inspección ambiental sin utilizar el principio de precaución contemplado en la ley 99 del 93 tal como el director lo ejerció contra AGA en Piedras. 

¿La falta de estudios impide tomar precauciones?

No obstante a la campaña de Responsabilidad Social Empresarial por la defensa de los Cerros Tutelares que Ecos del Combeima viene desarrollando, el pronunciamiento de Cortolima y la Secretaría de Planeación ha sido tibia en el sentido que no han entrado aplicar el principio de precaución que debe regir de forma obligatoria ante cualquier sospecha de amenaza para la ciudad. 

Por su parte el secretario de Planeación, Camilo Clavijo quien desde hace pocos meses entró a ejercer el cargo y quien se ha mostrado siempre presto a atender las dudas que han surgido frente a la investigación indicó que “el encargado de identificar este tipo de amenazas vulcanológicas es Ingeominas, cuando se formulan los Planes de Ordenamiento Territorial se tienen en cuenta las directrices que esta entidad determina y para el momento de firmar el POT no se había identificado ni caracterizado el Guacharacos y por consiguiente la amenaza que puede constituir para su zona de influencia, sin esta información es muy difícil incluirlo en los documentos de gestión del riesgo”. 

El Decreto Nacional 1807 del 2014 dictamina que es obligatorio incluir en los Planes de Ordenamiento Territorial todas las amenazas de tipo volcánica que presenten los municipios, al respecto Camilo Clavijo aclaró que “nosotros dependemos de los estudios que realice el Servicio Geológico Colombiano, mientras no tengamos la caracterización y los escenarios de riesgo sería irresponsable incluirlo”. 

Todavía es incierto el futuro de las laderas de los Cerros Tutelares 

Pese a estas afirmaciones es de recordarse que el geólogo David Galindo realizó un estudio de Identificación y Caracterización del volcán Guacharacos, que si bien no determinó la actividad del magma si lo vinculó con el arco volcánico del Cerro Volcán Machín y Cerro Bravo, el gran problema es que en Colombia no se le presta la debida atención e investigación a los volcanes monogenéticos que si bien podrían no representar un alto grado de amenaza si constituyen un patrimonio ambiental para el geo turismo según esta contemplado por la International Association of Volcanology and Chemistry of the Earth's Interior  IAVCEI.  

Frente al cierre definitivo del proyecto “Las Juanas” el secretario de Planeación indicó que se presenta una contradicción en el texto del POT y una irregularidad ante la identificación de las zonas en que se puede construir por lo cual este proyecto de urbanización se encuentra suspendido pero que no se aplicó el principio de precaución ante la presencia del volcán.