Volcán Guacharacos y la Gestión del Riesgo
Cortolima le pedirá al Servicio Geológico Colombiano que detalle mediante un estudio, el nivel del grado de amenaza que representa el volcán Guacharacos, en un área de influencia directa o indirecta de la vereda Potrerito al sureste de Ibagué. Creo que esta es una nueva manera de sacarle el quite al problema que representa el desconocimiento que se ha tenido del volcán Guacharacos en el POT de Ibagué.
El volcán Guacharacos está actualmente quietecito, dormidito y nadie puede predecir si se va a activar dentro de unos años. Pero en verdad es una amenaza que puede seguir en su sueño o despertar en cualquier momento, por lo tanto no se vale que ahora se pida un estudio de otros estudios que ya existen, la única verdad es que se ignoró la Ley de Gestión del Riesgo que debió incluir esté volcán monogenético en el POT.
Pensemos si no es riesgoso vivir en la falda de una caldera, que actualmente se encuentre apagada y quieta no quiere decir que la dinámica de la tierra la cual es impredecible, no termine causando que las personas salgan con la cola quemada y con todos sus bienes conseguidos a base de esfuerzo totalmente destruidos, es decir salir con el futuro chamuscado. Sería imperdonable el quemón para los profesionales involucrados.
Es Gestión del Riesgo tener en cuenta que la cuenca del rio Combeima está catalogada como de riesgo de remoción en masa la cual puede ser causada por la erosión, por la meteorización de las rocas y por movimientos sísmicos del volcán Nevado del Tolima. Es muy difícil aceptar que la remoción en masa no se aplicara en el POT, esta afecta directamente los asentamientos humanos, es una amenaza para la vida de las familias que irresponsablemente se dejaron establecer. El movimiento en masa más la presencia del volcán Guacharacos son los grandes enemigos para las urbanizaciones, granjas y toda clase de asentamientos urbanos que sin estudios previos se dejen establecer en esta zona.
No puedo creer que al Director de Cortolima, no lo invitaron la Gobernación, la Secretaría de Gobierno Departamental y la Dirección de Prevención de Desastres cuando expusieron el Plan de Contingencia del Vulcanismo en el Tolima por parte del Consejo Departamental de Gestión del Riesgo. En esta exposición precisamente, se hablo de Guacharacos y quedó clara su presencia en el sudeste de Ibagué, así como quedó en forma concreta la zonificación de la amenaza por movimientos de masa tipo flujo en la cuenca del rio Combeima y se dio a conocer la caracterización de la estructura volcánica de Guacarachos. Por esto me es imposible creer que el Director de Cortolima nada sabía porque si él no fue a la reunión su delegado tenía la obligación de informárselo.
La aplicación de la gestión del riesgo era urgente. En el macizo de Guacharacos nace la quebrada del mismo nombre también conocida como El salto la cual va a desembocar en un predio donde se suspendió la solicitud de 90 granjas agropecuarias. Pero también por el costado sur nace la quebrada ZANJA Honda que baña un costado del polémico proyecto “Las Juanas” adjudicado a carreras por el curador 2 de Ibagué ocultando que son 27 parcelas para casas campestres prohibidas por el POT, quebrada que desemboca antes de la vereda El Totumo. Si eso no merecía la aplicación de la gestión del riesgo estamos en nada, no se entendió que es Gestión del Riesgo.
Y también se relaciona con la Gestión del Riesgo el problema del agua. En mi último viaje a Ibagué visité el rio Combeima y su caudal estaba muy mermado. En este desesperante vaivén del clima si hay fenómeno del niño el caudal es mínimo pero si hay invierno la amenaza de remoción en masa es de tener en cuenta. Entonces con que agua van a garantizar calidad de vida para la parcelaciones y del Ecoturismo ¿ será que lo van a impulsar sin agua o es que piensan que hacer ecoturismo es solo vender arepas?
Dice la Ley que los municipios deben tener en cuenta en la elaboración y ejecución del POT la preservación, y conservación de los recursos naturales lo mismo que la prevención de amenazas y riesgos. Debe existir señalización y localización de las aéreas de riesgo para asentamientos humanos lo mismo que estrategias de manejo de zonas expuestas a amenazas y riesgos. Desde luego que esto demanda responsabilidad, estudio, actualización y pilera de los municipios y las Corporaciones Autónomas, las cuales deben apoyar y no dejar pasar esta tarea tan importante y urgente porque sin Gestión del Riesgo cómo quieren ordenar un territorio?