La conversión de divisas

El Forex permite a las sociedades y a los particulares convertir divisas. Todos entramos en juego, al nivel más sencillo, cuando viajamos al extranjero y que vendemos la divisa de nuestro país de origen a cambio de liquidez de la que tendremos necesidad para los gastos en el extranjero.

El Forex, más allá de las transacciones efectuadas por particulares y empresas, es importante para las instituciones financieras, los bancos centrales y los Estados. Facilita el comercio y la inversión a nivel internacional, puesto que permite a las sociedades que ganan dinero con una divisa comprar bienes y servicios en otra divisa.

Funcionamiento del Forex

Negociar con el Forex permite especular sobre el rendimiento relativo de una divisa con relación a otra. El Forex es el mercado financiero más popular del mundo, con un volumen colosal de transacciones efectuadas cada día. La mayoría de estas transacciones se efectúan por especuladores que compran y venden sobre las fluctuaciones de los cursos de los mercados.

Transacciones comerciales

Las transacciones comerciales y financieras tan solo representan el 10% aproximado del volumen de transacciones. El número importante de inversores y la cantidad impresionante de divisas intercambiadas cada día dan al Forex un nivel de liquidez excepcional. Esto significa que se trata de un mercado de acceso particularmente difícil para todos. Normalmente se pueden comprar divisas a la demanda, porque siempre hay alguien en alguna parte que acepta venderlas o al contrario.

Por otro lado, los mercados de divisas no son tributarios de los sistemas de comisiones, que complican a veces ciertos mercados. Por lo general, basta con una pequeña inversión inicial para comenzar, y los costes relativos a las operaciones son bajas. Las negociaciones se hacen tanto de día como de noche y permiten sacar provecho de un efecto palanca importante.

Fuente: forex1a.com (leer nota original)