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¡Que las ayudas no sean para la foto!

Espero que logremos salir de la crisis con el mejor resultado, o menor mal posible y que este tiempo de aislamiento, que tiene sus fases, pronto pase del miedo y pánico a la fase de ideación, planeación y acción. Por: Carolina Toro.
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Javier Pérez / Ecos del Combeima
6 Abr 2020 - 1:49 COT por Ecos del Combeima

Mateo 6:3 “que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha”. En estas épocas de altísima necesidad, muchos aprovechan para figurar y sacar provecho de la necesidad de la población. Organizaciones, grupos, colectivos, particulares, dedican sus esfuerzos en torno a ayudar a quienes lo necesitan, por cuanto es indispensable debido a que no somos un país rico y  no podemos pretender que se generen las mismas políticas que se implementan en países desarrollados. Cada solución debe ser producto de nuestra realidad y capacidad; lo esperable es que lo que se defina en la administración nacional, departamental y local, sea ejecutado con absoluta celeridad y eficiencia.  Lo deseable es que  que todas las ayudas que lleguen de los privados, sean con un auténtico interés por apoyar y contribuir a la sociedad brindando alivios y esperanza. La gran mayoría, desde su generosidad, trabaja desinteresadamente,  otros, por el contrario, tienen un interés particular para aprovecharse de la situación y figurar para “salir en la foto”. Ayuda es ayuda y pensaría que ante la tragedia que significa el aislamiento para la población vulnerable, no importa la motivación que se tenga, lo importante es ser solidario y que llegue el beneficio;  sin embargo,  estas ayudas suelen pasar cuentas de cobro en el futuro, pues si el interés no es altruista, seguramente esas “indulgencias con Ave Marías ajenas”, tendrán una contraprestación que favorecerá a unos pocos. En otras palabras, utilizarían este escenario de crisis para promover ayudas con el único propósito de sacar provecho personal.

No hay ayuda pequeña, pues usted puede recolectar plata y apadrinar una o varias familias, hasta unirse con empresarios capaces de hacer grandes donaciones; también puede apoyar a un pequeño emprendedor comprando sus productos, por ejemplo en las tiendas de barrio, las verduras en los puestos de las plazas de mercado, comprar a domicilio comida, desayunos sorpresa, hasta ir a la gran cadena a comprar, pues eso garantiza que parte de la economía circule.

No debemos satanizar a las empresas que toman decisiones impopulares en momentos de crisis, pues nadie sabe la caja y la situación financiera de nadie. Quienes no tengan la posibilidad de pagar 6.000 salarios mientras permanezca la orden de aislamiento,  y por el contrario esté sufriendo del contagioso insomnio por no saber cómo continuar su empresa, le quiero decir que merece toda mi admiración. Usted es un verdadero héroe porque le apuesta a tener empresa superando todas las pruebas que significan mantenerse vivo; usted tiene que sortear las contingencias del mercado, debe responder por sus obligaciones legales, fiscales y laborales,  endeudarse, trabajar 7 * 24, sacrificar tiempo en familia, responder por el bienestar de sus colaboradores, mantener la frente en alto y creer que todo es posible, ser visionario, ser resiliente, anticiparse, innovar, servir, mantenerse soñador y optimista frente a la adversidad y, cuando cree que todo empieza a funcionar o cuando estaba tratando de salir a flote con su negocio, se da cuenta que es cierto lo que dicen algunos economistas, que “china estornuda y el mundo tiembla” y es que no  solamente fue cierto porque literal estornudaron y porque también  ha temblado en estos días, sino porque en efecto, esta pandemia ha generado una afectación nunca antes vista en la vida moderna con evidentes impactos a la economía global. Si el Down Jones bajaba no era un problema para la mayoría de los emprendedores locales, así mismo poco o nada la variación del IGBC, o que los jeques árabes pelearan con Trump, aunque este último evento podría impactar a los importadores, concretamente por el incremento del precio del dólar y ciertamente a todos por una eventual inflación si el Banco de la Republica no intervenía las tasas de interés, pero jamás nos hubiéramos imaginado que tuviéramos que cerrar nuestros negocios por una causa como la del Covid-19. Aún hace 15 días sonaba extraño pensar que nos pudiera afectar.

De cara a esta realidad existen muchas alternativas, solo hay que aprender a verlas; que las preocupaciones no le quiten la capacidad de resolver, de anticipar y sobre todo de tomar decisiones. Cualquier estrategia debe generarle tranquilidad y no pretendo decirle cuál sería el camino porque ni yo misma lo sé; pero sí creo que todo esto ni es un castigo divino, ni es merecido, ni el planeta nos castiga con el virus para respirar,  ni es un arma de china contra USA o de USA contra China, ni ninguna de esas causas que muchos ahora esgrimen; lo cierto es  que esas situaciones se han presentado a lo largo de nuestra historia incluso con muchos más muertos, como la peste negra entre ( 1347 y  1351) que dejó 200 millones de muertos o la gripa Española que produjo 50 millones de muertes. Antes no teníamos una economía globalizada y la posibilidad de transportar un virus estaba limitada. No hay evidencia científica actual que  demuestre que el Covid-19 haya sido creado en un laboratorio, así que no vale la pena desgastarse en encontrar causas fundamentadas en rumores que seguro terminarían generando más conflicto. Quién quiere ver a Trump bombardear a China o viceversa? Obviamente nadie, lo importante es centrarse en encontrar información para tener claridad y certeza para la toma de decisiones. Si usted no se informa y le sigue creyendo a las cadenas de WhatsApp o a las noticias falsas de las redes, va a tomar decisiones erradas. Asesórese y encuentre su camino conforme a sus capacidades financieras, operativas y emocionales; es un momento que pone a prueba nuestra capacidad de manejo y de respuesta porque existe la alternativa de quedar en parálisis y no hacer nada o ejecutar un plan que le permita salir victorioso de la crisis. Piense primero en Usted, su familia y su negocio, respetando y cumpliendo su deber legal con sus colaboradores, pues si su negocio está bien, va a poder sobrevivir y continuar generando empleo,  pagando impuestos y construyendo país, o como lo dicen muchos ahora, construyendo región.  Déjese ayudar o pida ayuda y aprenda de esta experiencia; es cierto que la gran mayoría no tiene la caja para sobrevivir hasta mayo 30,  porque es difícil tener provisiones para todos los riesgos cuando se tiene una pyme en esta región con tantas oportunidades;  pero es un aprendizaje que se debe apropiar, pues hoy es un virus, mañana puede ser otra calamidad.  Tener seguros es clave también.

Espero que logremos salir de la crisis con el mejor resultado, o menor mal posible y que este tiempo de aislamiento, que tiene sus fases, pronto pase del miedo y pánico a la fase de ideación, planeación y acción. Que el insomnio sea un espacio de creatividad y no de preocupación, que encuentre en su entorno manos amigas que le ayuden, desde una frase lo anime, un consejo, una idea o lo que le sirva para continuar. Aprenda, que si al final le toca liquidar su empresa, le quedara una experiencia que seguro capitalizará  en el futuro. Recuerde que grandes capitales e historias de éxito tuvieron como precedente muchas quiebras y ese cuento que la vida tiene un límite y que  a determinada edad debemos tener cierto capital  o ser personas poderosas e influyentes, son libretos que no debemos comprar ya que  todo tiene su momento y su ritmo;  al final, cuando en el futuro vea en retrospectiva toda esta serie de eventos, concluirá que fueron necesarios para ser quien será y hallará motivos para agradecer y continuar. Usted es el que le dará significado a su historia y la transformará en algo positivo  o negativo según su elección. No culpe al destino, a la suerte, a Dios, al Gobierno, a los Chinos ni a la naturaleza. Aprenda y agradezca;  mándele a la vida energía y pensamientos positivos para que no se enferme. El estrés es fuente de muchas enfermedades, no le de espacio a la enfermedad para que entre, que con huirle al coronavirus tiene. Si cree que necesita ayuda profesional para hacerle frente a la crisis, utilice los mecanismos dispuestos por el Gobierno y las diferentes entidades y ONG´s  que son conscientes del fuerte impacto que la pandemia esté generando en la mente de todos nosotros.

Ayude al que pueda y tenga fe que el Gobierno está haciendo lo mejor para que todos podamos salir adelante con el menor daño posible. Yo tengo fe y confío que así sea. Lo invito a pensar igual. Y por favor de nuevo QUÉDESE EN CASA.

 

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