Una madre de familia denunció la crisis y desespero que tuvo que pasar en un hospital donde presuntamente no atendieron a su hijo de tan solo cinco meses de nacido. La mujer indicó que su retoño tenía síntomas de fiebre, vómito, tos, flema y ronquidos al respirar por lo que recurrió a llevarlo al centro asistencial.

Los hechos ocurrieron en el municipio de Salento, Quindío, lugar turístico del eje cafetero, momento en que Natalia Rodríguez Arenas reprochó el mal servicio del hospital San Vicente de Paul. Además, Rodríguez sostuvo que su bebé no fue atendido ni remitido por la clínica, y que los servicios, al parecer, le fueron negados porque solo estaban atendiendo personas en estados graves.

Desafortunadamente, Natalia recurrió a tomar un bus y llevar a su hijo hasta Circasia para que pudiera tener atención de los galenos. Por otra parte, informa que perdió toda la mañana en el lugar hasta que la atendieron en horas de la tarde para luego ser remitido a Armenia, teniendo en cuenta que, el recién nacido necesitaba de unos exámenes.

A la fecha, el hospital presenta varias problemáticas, por lo que no es posible ofrecer el servicio que merecen los usuarios del municipio, zona rural y los miles de turistas que transitan el lugar. Por otra parte, se conoce que desde el 08 de noviembre del año pasado no se recogen los residuos hospitalarios, dejando en riesgo la salud de los usuarios y profesionales de la salud.

Finalmente, varios exempleados del hospital indican que hay funcionarios que han trabajado hasta dos meses sin ningún tipo de remuneración.